ESPAÑA

Los obispos recuerdan que «no hay ninguna ley» que prohíba la presencia de crucifijos

La polémica «no debe convertirse en un problema», dice el portavoz de la Iglesia

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Los obispos han recordado que «no hay ninguna ley» que prohíba la presencia de crucifijos u otros símbolos religiosos en lugares públicos. Así lo expresó ayer el recién reelegido secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Juan Antonio Martínez Camino. El también obispo auxiliar de Madrid abogó por que esta controversia «no se convierta en un problema artificial ni en causa de malestar social».

El portavoz del Episcopado reflexionó en abierto sobre cómo se pueden quitar los crucifijos del colegio público Macías Picavea, de Valladolid, origen de la polémica, «cuando los padres mayoritariamente piden» que permanezcan. Adujo que la presencia de signos religiosos en toda Europa «no suele ser un problema». «El problema es crearlo donde no lo hay, pero son actuaciones minoritarias que no reflejan el sentir social», sostuvo.

Los signos religiosos «son de nuestra cultura y de nuestra Iglesia y si se deja ese espacio vacío, quién lo llena», se preguntó. La cultura de la libertad, insistió, «está simbolizada en los signos cristianos y, en particular, en el crucifijo». Acerca de quienes pretenden «hacer desaparecer» estos signos, se interrogó sobre «qué interés persiguen», máxime cuando un Estado no confesional «es compatible con el crucifijo. ¿O vamos a quitar las cruces de todas las catedrales?».

Como colofón, el portavoz de los prelados añadió que la presencia de los signos religiosos «no es incompatible con un Estado respetuoso de la libertad religiosa, ya que no están contra nadie, como lo demuestra la Historia de España en los últimos 30 años».

Por otra parte, Camino aseveró que la Asamblea Plenaria «no es dura ni blanda, ni de aquí ni de allá», cuando fue interpelado sobre si su renovación podría interpretarse como el triunfo del sector más duro del Episcopado, máxime cuando el obispo auxiliar de Madrid está considerado la 'mano derecha' del cardenal Rouco Varela.