Más de 300 menores son imputados en la provincia por conducir sin carné tras la última reforma penal

Con el tercer parque móvil de ciclomotores más grande del país, la provincia de Cádiz era una víctima propicia de la última reforma del Código Penal, que castiga con más contundencia las irregularidades a bordo de estos vehículos. Se esperaba, además, una cifra relevante de delitos cometidos por menores, principales usuarios de este tipo de motos de escasa cilindrada. Y la realidad, seis meses y medio después de la entrada en vigor de una medida que convirtió en delictivo lo que antes era una simple infracción administrativa, ha venido a dar la razón a los peores augurios.

El pasado 1 de mayo se hacía efectiva la reforma penal que reservaba penas de cárcel o trabajos en beneficio de la comunidad para quien conduzca sin permiso de conducir o licencia para ciclomotores. Y esa medida, trasladada a la jurisdicción de Menores, ha supuesto un reguero de expedientes que están dando mucho trabajo a los fiscales especializados de la provincia. El dato provincial no deja indiferente: en seis meses y medio se han tramitado 339 expedientes, siendo la sección de Jerez, con competencia en la Sierra y Costa Noroeste, la que tiene una carga mayor de trabajo (133 casos), frente a los 107 de Cádiz -incluyendo los municipios de la Bahía- y 99 del Campo de Gibraltar.

La fiscal responsable de la sección en Algeciras y que ejerce de coordinadora provincial, Inmaculada Budiño, describe el día a día que viven desde el 1 de mayo. «Se trata del delito estrella y el que está aglutinando más asuntos desde su entrada en vigor. En el corto tiempo transcurrido ya constituye la cuarta parte de todo el volumen de asuntos de la jurisdicción de Menores», y según Budiño las perspectivas es que sigan creciendo las denuncias contra menores que son sorprendidos sin licencia. En la comarca algecireña ya supera otro tipo de conductas delictivas muy comunes como las lesiones, amenazas o las agresiones dentro del ámbito familiar. Aunque aún es pronto para dar cifras de comparativas exactas porque la reforma penal en cuanto a la conducción sin permiso no tiene ni un año de vigencia.

En esta zona de la provincia la media oscila entre ocho y nueve jóvenes detenidos a la semana por conducir sin licencia; los casos de menores al volante de turismos aún son una excepción.

En cambio, en la Fiscalía de Cádiz ya se han topado con media decena de expedientes por este motivo: circular con coches pese a que no han alcanzado la edad reglamentaria para obtener el permiso. El fiscal coordinador de reforma, en materia de Menores para la zona de Bahía, Rafael Álvarez Cienfuegos, describe una situación análoga para este pequeño grupo de infractores, que aún no son representativos en las estadísticas. «Son chicos que ya rozan la mayoría de edad y que les suelen coger el coche a los padres, adoptando ya comportamientos de adultos».

La media de incidencia de los delitos de conducción sin carné o licencia en Cádiz capital y su entorno más próximo es la de un joven denunciado al día. Si bien en esta parte de la provincia, los insultos y las amenazas siguen liderando la clasificación de conductas delictivas más recurrente entre adolescentes, pero ese 'liderazgo' tiene una nueva amenaza en este tipo incluido dentro de los delitos contra la seguridad del Tráfico.

Archivo de expedientes

También hay diferencias en la resolución de esos expedientes entre el Campo de Gibraltar y la Bahía. En la Fiscalía de Menores de Cádiz, el 90% de los asuntos que les ha llegado desde el 1 de mayo termina en un archivo sin consecuencias legales para el infractor. Esta posibilidad se aplica en aquellos adolescentes sin antecedentes y que están inmersos en una entorno de escaso riesgo social. Ése es el perfil medio de los jóvenes detenidos hasta la fecha en la Bahía gaditana. Pertenecen, además, a distintos estractos, desde la clase alta a la baja, aunque todos tienen en común: «el escaso control que ejercen sobre ellos sus padres y unas actitudes precoces ante la vida», dice el fiscal Rafael Álvarez. Y en los casos tratados hasta ahora no cabe apelar a la ingenuidad del menor: «Saben perfectamente que están cometiendo un delito cuando circulan sin licencia. Existe mucha información sobre ello, pero siempre esperan que no les van a pillar porque todo depende de que sean sorprendidos por algún control de la Policía».

Y una curiosidad más en este primer avance que se hace de las consecuencias que ha traído consigo la aplicación de esta última reforma del Código Penal; según Álvarez Cienfuegos, Chiclana es el municipio donde se están produciendo más detenciones.

Temerarios y sin permiso

Las condenas, en cambio, sí están llegando en el Campo de Gibraltar, donde a diferencia de Cádiz el porcentaje de archivo de los expedientes es muy pequeño. Esto se debe a que los fiscales se están topado con una realidad distinta. Muchos de los casos los protagonizan menores que no sólo son pillados con un ciclomotor sin permiso, sino también realizando una conducción temeraria, que está tipificado como un delito diferente. De ahí que el archivo no sea posible.

El nivel de reincidencia hasta la fecha es nulo. Los más de 300 menores que ya han sido detenidos son los primeros de una lista que desde el Ministerio Público, con algunas reticencias, vaticinan que será mayor en las próximas fechas.

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