PACTO DE LA VIVIENDA. Representantes de las entidades bancarias y de la Junta. / EFE
LA MIRILLA ANDALUZA MARÍA DOLORES TORTOSA

El apoyo de la banca

Una treintena de entidades bancarias aseguran la financiación del plan de vivienda andaluz, una de las medidas estrella de la Junta. La patronal reincide en desconfiar de estas medidas y de otras contra la crisis. Mientras el PP culmina sus procesos congresuales, Izquierda Unida se echa literalmente a la calle

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LA patronal andaluza no está conforme con los Presupuestos de la Junta para 2009. Los considera poco arriesgados, poco atrevidos para los tiempos que corren. La respuesta del PSOE y del mismo Chaves no se ha hecho esperar. Les dicen a los empresarios que arrimen el hombro y protesten menos, que la crisis es responsabilidad de todos. Chaves incluso les advierte seriamente de que no va a consentir que aprovechen la crisis para realizar despidos a mansalva. Lo que está ocurriendo. El panorama en Andalucía no es halagüeño. No hay día que no se anuncie un ERE de alguna empresa. Incluso la que ha sido la joya de la corona, la aeronáutica, con factorías en Cádiz y Sevilla, ya está a las puertas de regulaciones de empleo. El Gobierno andaluz hace lo que puede, pero puede poco. Anuncia goteos de ayudas a las empresas que a estas saben a poco. La última la hizo Chaves el viernes: 32 millones de euros para que las empresas consigan mercados en el extranjero. La situación es complicada y sólo con la sensatez y el esfuerzo de cada parte, empresarios, administración y trabajadores, puede salirse airoso del mal momento.

PACTO CON LAS CAJAS Y BANCOS

La vivienda, financiada

Son días de muchas propuestas, acuerdos y buenas intenciones. La firma de la Junta con una treintena de entidades bancarias para poner en marcha el Plan de Vivienda es una de ellas. Los bancos y las cajas se reparten un cupo de más de 9.000 millones para favorecer la compra de un piso de VPO. Los créditos son blandos, pero no los requisitos: están vedados los morosos y los que no garanticen un sueldo mínimo de 600 euros. También habrá que ahorrar para la entrada, ya que el préstamo sólo se dará al 80% del precio de la vivienda. Son condiciones en cualquier caso razonables, como ocurriera con otros planes de vivienda de los 90, con las que los bancos se garantizan la devolución del préstamo en al menos 25 años.

Esas exigencias hoy en día, a la vista del descalabro financiero de otros bancos extranjeros, tranquilizan. El pacto es un paso más de este nuevo ambicioso y oportuno plan de vivienda con 135.000 actuaciones en cuatro años. Un plan que la patronal Fadeco critica sin mucha razón, porque habrá viviendas y trabajo mientras se lleve a cabo. La única pega que debería hacerse al Gobierno de Chaves es lo que ha tardado en darse cuenta de la dificultad de muchas familias y jóvenes para adquirir una casa. A lo mejor ahora, con la crisis encima, hasta esos créditos blandos resultan duros.

CONGRESOS DEL PP

El liderazgo de Arenas

Durante el fin de semana que empezó el viernes y el próximo, Javier Arenas se multiplicará por ocho para acudir a los congresos provinciales de su partido. Unos congresos en los que afianzará su liderazgo, por otra parte consolidado desde hace años. A Arenas le acompaña el cierre de filas de su partido desde los tiempos de ministro de Trabajo, cuando Teófila Martínez era la presidenta regional. Un liderazgo que el dirigente popular alimenta con kilómetros de viaje por la geografía andaluza para estar en todos sitios y alentar a los suyos. Un liderazgo, además, que le ha valido que Rajoy cuente con él en la cúpula nacional del PP. Este arropamiento interno es realmente importante para su objetivo en conseguir la Presidencia de la Junta.

Lo que puede distraer, aunque resulte entretenido, de dicho cometido es su afición por acudir a los tribunales contra sus adversarios políticos. Cierto que lo de «matón de discoteca» es una salida fuera de tono innecesaria y reprochable por parte de Pizarro. Pero en esto de lanzarse insultos casi nadie está libre de culpa. Hasta ahora han sido varios los cruces de denuncias entre los políticos andaluces que los jueces han sentenciado como algo propio de la pugna política. Famosos entre ellos fueron los de Arenas y Zarrías. A ver que pasa ahora.

Mientras el liderazgo de Arenas no se discute, Diego Valderas intenta recomponer el suyo volviendo a las calles como en los ochenta. Incluso se ha puesto al frente de las movilizaciones. Quizás los tiempos sean otros. O el tiempo dirá.