PARQUES. Los vecinos se encargan del mantenimiento de las zonas comunes. / C. L.
EL PUERTO

El Ayuntamiento reconoce que no puede asumir el mantenimiento de Costa Oeste

Candón anima a los vecinos a seguir sufragando los costes por la falta de dinero Varias urbanizaciones han dejado de pagar las cuotas de los servicios comunes

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No hay dinero para todos. El Ayuntamiento no puede hacer frente a los gastos de mantenimiento de Costa Oeste, por lo que las urbanizaciones afincadas en esta zona de El Puerto tendrán que seguir haciendo frente a los servicios comunes de jardinería, alumbrado y, en algunos casos, seguridad privada. «Tenemos un millón de euros para toda la ciudad, y si Costa Oeste decide no ocuparse de su mantenimiento nos veríamos desbordados», asegura el edil de Mantenimiento Urbano, Alfonso Candón.

Las urbanizaciones construidas en Costa Oeste se organizan a través de entidades urbanísticas de conservación. Los vecinos abonan mensualmente una cuota que oscila entre los 25 y los 40 euros, que se destina a los gastos de mantenimiento. La iluminación, el pintado de las calles, el cuidado de parques y jardines, e incluso la contratación de seguridad privada corre a cargo del bolsillo de los vecinos.

Estas entidades urbanísticas nacieron hace alrededor de una década para encargarse del mantenimiento de esta nueva zona de crecimiento de El Puerto. Según la ley, pueden eliminarse a los cuatro años, y de hecho, ya hay zonas, como El Naranjal, que han suprimido la entidad urbanística al considerar que «es el Ayuntamiento y no los vecinos los que tienen que hacer frente a los gastos de mantenimiento», según explica Luis Retortillo, presidente de la asociación de vecinos.

Pero los residentes de esta urbanización se han topado con una «desagradable sorpresa». Según denuncia Retortillo, «la urbanización está totalmente abandonada. Los jardines no se cuidan, los parques no se mantiene y ni siquiera se podan las palmeras que están incluso adueñándose de las aceras».

«Ni un céntimo más»

A pesar de esta «dejadez», hay vecinos de otras urbanizaciones que quieren adherirse a la desintegración de las entidades urbanísticas. Éste es el caso de Joaquín de Cos, vecino de la urbanización de La Oropéndola, que denuncia que «está harto de pagar unos servicios a los que tendría que hacer frente el Ayuntamiento». Por ello, aseguró que en la próxima asamblea vecinal dejará claro que no abonará «ni un céntimo más a la entidad urbanística de conservación».

Pero, ante el miedo de que el Ayuntamiento no garantice el mantenimiento, hay vecinos que se muestran reacios a suprimir estos organismos autónomos. Así, los vecinos de Las Arenillas, consideran que «es preferible destinar 30 euros al mes al cuidado de la urbanización, a ver que pasan los meses y todo se deteriora».

Por su parte, el concejal de Mantenimiento Urbano, Alfonso Candón, invita a los vecinos a seguir sufragando los gastos de mantenimiento, aunque del mismo modo, se compromete a colaborar «en la medida de lo posible» en algunos de los servicios. De hecho, asegura que hay zonas en las que el Ayuntamiento está asumiendo trabajos de alumbrado. En cuanto a las quejas de El Naranjal, declara que «el área ya está solucionando, poco a poco, cada una de las reclamaciones que han realizado los vecinos de la zona».

elpuerto@lavozdigital.es