CALLE PORVERA

Tributo a nirvana: el origen

Todo tiene un comienzo y, desgraciada o afortunadamente, suele tener un final, con toda la carga peyorativa que puede a veces acarrear esta palabra. Pues bien, por mis incursiones culturetas debidas a este periódico, puedo decir que el origen de que cierta música y ciertos nombres estén empezando a escucharse en la ciudad viene de un concierto que parece que ha marcado un antes y un después y ha propiciado un despertar necesario, creativo e interesante en Jerez

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Aquel punto de inflexión lo constituyó el concierto Tributo a Nirvana que se celebró en el Bitter Club hace aproximadamente un año. Del éxito de aquella noche -mucha gente se quedó fuera del local, que estuvo abarrotado- derivó otra nueva sesión que tuvo lugar en la Sala Compañía que, por cierto, estuvo igual de repleta. Por lo que me cuentan, parece que no fue hasta entonces cuando las administraciones locales percibieron que entre los jóvenes había otras inquietudes bastante al margen de los éxitos musicales más comerciales y que merecía la pena apostar por ellas.

Este mes de noviembre, de la mano de GreenSet, llegó la Freak Scene Rock, un ciclo que ofrece un concierto cada fin de semana a un precio asequible para los bolsillos estudiantiles y mileuristas, en el mejor de los casos. Los grupos elegidos son de Jerez y otras localidades de la provincia que representan las nuevas tendencias y la experimentación de músicos de entre veinte y treinta años. Parece que algo empieza a moverse en Jerez, que ya era hora, aunque queda muchísimo por hacer. Como decía al principio, todo lo que empieza suele tener un final aunque espero que esta nueva movida jerezana sea la excepción que confirma la regla.