Cabaña apoya a Barroso y dice que su crítica al Rey fue en un contexto político

El alcalde de Puerto Real, José Antonio Barroso (IU), ha recibido el respaldo de su partido y de los socialistas tras ser imputado por la Audiencia Nacional por un delito de injurias a la Corona. Uno de los primeros políticos en brindarle su apoyo ha sido el secretario provincial del PSOE de Cádiz, Francisco González Cabaña, que respeta «escrupulosamente la decisión de la justicia» tanto si le gusta como si no, aunque señaló que la imputación de Barroso no le gusta.

Así, el dirigente socialista aclaró que «un imputado no es un condenado y ni siquiera un procesado». En su opinión, puede darse el caso de que cualquier persona «preste un día declaración como imputado y, al día siguiente, el juez puede decidir el archivo del caso».

Cabaña fue más allá de la mera imputación y explicó que las declaraciones de Barroso en abril ante el Ateneo Republicano del Campo de Gibraltar se hicieron en un contexto político. Según Cabaña, «lo que hay son unas diligencias abiertas, se le cita en su condición de imputado y nada más». Finalmente, no se mostró partidario de las imputaciones a políticos por sus declaraciones y consideró que Barroso se pronunció «en el ejercicio de su condición política».

El alcalde puertorrealeño ha sido citado a declarar el próximo lunes en la Audiencia Nacional en calidad de imputado por un delito de injurias a la Corona, debido a unas declaraciones realizadas en Los Barrios donde tachó al monarca de «corrupto».

Por su parte, el coordinador regional de IULV-C, Diego Valderas, se solidarizó ayer con el alcalde puertorrealeño y consideró «tremendamente injusto» que la Audiencia Nacional «quiera meterse con una opinión libre». El líder andaluz de IULV-CA defendió las opiniones vertidas por Barroso, ya que, según dijo, «tiene derecho a la libertad de expresión, que viene recogida en la Constitución».

Por su parte, el coordinador general de IU, Gaspar Llamazares, indicó que le parece «muy mal» que la Audiencia intente «criminalizar» el pensamiento de Barroso y que se intente «convertir el pensamiento republicano en un problema de orden público». «La Audiencia Nacional tiene cosas más importantes de las que ocuparse que de la libertad de opinión de un alcalde», añadió. Para Llamazares, las ideas republicanas están en «el debate político» y son «totalmente legales», por lo que el llamamiento realizado por la Audiencia Nacional a Barroso «no tiene nada que ver con la pluralidad democrática de nuestro país».