Madrid considera que la crisis va a beneficiar su candidatura

Millones de personas pendientes de una ciudad durante tres semanas. Los ojos del mundo entero fijos en los poco más de nueve segundos que tardan en disputarse los 100 metros. El rugir del público mientras los nadadores se deslizan con elegancia sobre el agua y detienen el crono en un tiempo estratosférico. El clamor de un estadio tras un gol en el último minuto, después de un triple imposible, o de un salto espectacular tras completar un ejercicio soberbio en anillas o paralelas. La superación del hombre a través del deporte. Este es el ritual que se celebra cada cuatro años, y Madrid está convencido de poder realizarlo para el 2016.

En tiempos de crisis económica, el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón, aseguró ayer que el presupuesto para el proyecto (40,4 millones de dólares, el más bajo de los cuatro) no se reducirá ni un euro. Además, apuntó que Madrid, con el 70% de las instalaciones construidas, es la metrópoli con las infraestructuras más avanzadas. «Londres ganó con un proyecto virtual. Entonces nadie dudaba de la capacidad financiera para llevarlo a cabo. Ahora, que una ciudad sólo tenga pendiente un 30% de las obras es un valor añadido y trascendental», explicó el edil.

El avanzado estado de las construcciones puede beneficiar las opciones de la capital si el Comité Olímpico Internacional (COI) estima arriesgado elegir un proyecto con demasiados diseños y maquetas pero pocas realidades tangibles. Además, supone un ahorro considerable al tener que gastar menos en nuevas edificaciones. También beneficia que el apoyo popular al proyecto sea del 92%, el más elevado de las cuatro candidatas.

Queda un año, hasta el 2 de octubre de 2009, para que el COI anuncie en Copenhague la sede para acoger los Juegos de 2016. La capital española compite con Tokio, Chicago y Río de Janeiro. El alcalde se mostró seguro de conseguir el objetivo. «Tenemos el mejor proyecto. Hemos aprendido del realizado para 2012 y el resultado es muy superior", declaró. Todo está preparado para entregar el dossier, de más de 700 páginas con los datos técnicos y deportivos de la candidatura, el próximo 12 de febrero al máximo organismo olímpico. Sus 111 miembros deben leer y analizar el documento presentado por las cuatro ciudades y decidir la mejor opción. Antes, una comisión evaluadora compuesta por nueve miembros visitará las villas candidatas para comprobar 'in situ' las instalaciones y realizar un informe, que aunque no es vinculante es muy orientativo para el comité.El único baremo significativo son las notas con las que el organismo internacional calificó a las ciudades que pasaron el corte en Atenas. Madrid obtuvo un 8,4, sólo superado por Tokio con 8,6. Lejos quedaron Chicago (7,4) y Río de Janeiro (6,8). Sin embargo, Gallardón no piensa en una lucha mano a mano con la capital nipona. «No vamos a hacer una candidatura mirando a los rivales. No vamos a ganar porque los demás lo hagan mal, sino porque somos los mejores», puntualizó.

Aprender de la derrota

Cuando se anunció que la capital británica era la elegida, todo el mundo recordó una norma no escrita por la cual no se celebrarían dos Juegos seguidos en el mismo continente. «Preguntamos al COI sobre si esta circunstancia perjudicaría nuestras posibilidades y nos aseguraron de forma rotunda que no».