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Una 'Policía del Mar'

La decisión del Gobierno español de enviar un avión de reconocimiento y patrulla con un equipo de cerca de 100 personas para garantizar el mantenimiento y, sobre todo, procesar la información ha debido ser tomada en contacto estrecho con el francés, que encabeza el esfuerzo europeo en la lucha contra la piratería en el Golfo de Adén.

nrique Vázquez Actualizado: Guardar
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En el área atuneros españoles y franceses están siendo hostigados, algunos han sido secuestrados y se ha debido pagar un rescate para recuperar tripulantes y barcos y varias naves de recreo han sido igualmente capturados por piratas que utilizan ciertos bufetes europeos, sobre todo en Londres, como mediadores y, de hecho, para organizar el envío del dinero.

El avión español es un viejo (aunque modernizado) P-2, Orión. en la jerga de la fuerza aérea, y es todavía un excelente instrumento en la obtención de información en el mar, especialmente en la lucha anti-submarina.

Tendrá su base en el aeropuerto de Yibuti, una cercana ex colonia francesa, el Territorio Francés de los Afars y los Issas que, con la independencia, firmó acuerdos de defensa con París, que mantiene allí la base aérea e importantes contingentes de efectivos de tierra.

Más allá de su significación como un gesto en defensa de nuestros pescadores de altura que faenan en el Indico con base en las islas Seychelles, el envío debe ser encuadrado en el proyecto francés de crear una auténtica Policía del Mar, como la ha llamado el presidente Sarkozy, quien el martes dio la orden a sus comandos de liberar -y lo hicieron con éxito- a los últimos franceses secuestrados.

Mientras París anuncia que recurrirá a la ONU, en la Unión Europea se ha acordado ya estudiar la eventualidad de poner en marcha una directiva estratégica que desembocaría, para decirlo llanamente, en una gran operación militar aeronaval y terrestre.

Cualquiera sabe lo que hay que hacer: atacar Eyl, en cuyo puerto están los barcos secuestrados, capturar a cuantos piratas sea posible y establecer un dispositivo permanente en el área.

Queda arreglar un grave problema: con quién hablar en Somalia. Eyl es el puerto de una región autónoma, Puntland, controlada por irregulares de un clan, los Yonis Idiris, que se sienten independientes, y lo son de facto, del Gobierno técnicamente legal de Somalia que apenas controla a duras penas la capital, Mogadiscio.