Los vecinos de El Molino exigen mayor presencia policial tras los actos vandálicos de los últimos días

A principios de mes sonaron las primeras alarmas cuando vecinos del Grupo Residencial El Molino denunciaron el vandalismo que sufren diariamente por parte de menores residentes de La Inmaculada y Los Milagros, dos barriadas próximas en las que se está llevando a cabo «una nefasta política de realojos», según Ramón Ruiz, presidente de la Asociación de Vecinos El Palmar de la Victoria.

Pero no es sólo un problema que afecte a las 346 viviendas del Grupo sino a toda la zona. Este fin de semana, cuatro motocicletas fueron incendiadas a las puertas de una farmacia situada en la esquina de la calle Toneleros y Nuestra Señora de los Santos. No hubo que lamentar más daños que las propias motos, pero el incidente ha provocado que aumente la inseguridad de todos los vecinos adyacentes a La Inmaculada y Los Milagros.

Por este motivo, los representantes de El Molino y El Palmar de la Victoria, en busca de soluciones, han pedido tener encuentros con el alcalde, Enrique Moresco; el comisario del Cuerpo Nacional de Policía, José Montes; y el delegado de Gobierno de la Junta de Andalucía, José Antonio Gómez Periñán. Asimismo, Ruiz comentó que en el caso de no obtener medidas resolutivas, los vecinos optarían por medidas «más reivindicativas».

Tras los incidentes, el Ayuntamiento aseguró ayer que la presencia de la Policía Local en la zona se ha incrementado. Sin embargo, los vecinos atestiguan que «en el caso de que se esté haciendo, no es eficiente, y además ninguno entra en los jardines, que es donde está el problema». Montes ha declarado que ya ha dado instrucciones para que se reúnan con Seguridad Ciudadana para estudiar «que más se puede hacer allí».