CAMBIOS. Aún permanece la señal de fin de la zona azul. / C. C.
SAN FERNANDO

La zona azul de la calle Real se traslada a San Antonio y provoca la queja de los vecinos

Temen que la medida se extienda hacia El Plaza y colapse las zonas cercanas La falta de antelación les ha impedido a muchos pedir la tarjeta de residente

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La nueva distribución de las 107 plazas de zona azul reubicadas, como consecuencia de las obras que se están llevando a cabo en la calle Real, en el centro de la ciudad se ha convertido en un quebradero de cabeza para los vecinos del entorno del mercado de San Antonio y de la calle Colegio Naval Sacramento, ya que el buscar aparcamientos en tales vías resulta una odisea que está colapsando las calles colindantes. Entre las principales quejas de los ciudadanos se encuentra la de falta de previsión, sobre todo porque no se ha dado un margen de tiempo suficiente para conseguir la tarjeta de residente. Según afirman los propios vecinos, «la reconversión de la calle se ha producido de un día para otro y sin la suficiente antelación para realizar los trámites».

El entorno del Mercado de San Antonio ha recogido un total de 33 plazas de zona azul, mientras que en Colegio Naval Sacramento el número asciende a 39, la totalidad de la calle. Así, principal preocupación de los vecinos de esta zona es que con el progreso de las obras la tendencia continúe, de modo que la zona azul se extienda hacia el centro comercial El Plaza. Temen, de forma, que se encuentren completamente rodeados de zonas de estacionamiento regulado y como expone José Luis Llerena «entonces la única solución será la de buscar aparcamiento por El Barrero, que se encuentra demasiado lejos de nuestras viviendas».

Aunque el servicio comenzó el el pasado lunes, ya se acumulan varias multas por aparcar sin pagar y el aspecto de las calles han cambiado totalmente debido a los huecos existentes. Algo que beneficia a los negocios, porque da accesibilidad a los clientes. Sin embargo los trabajadores del lugar aseguran que la medida les perjudica ya que hay muchos que viven fuera de La Isla y no pueden conseguir, por tanto, la tarjeta de residente. Para algunos el trabajar les supone un gasto elevado.

El resto de plazas de zona azul han sido reubicadas en la Plaza del Rey, con un total de diez aparcamientos, y en la misma calle Real, donde se han implantado 25.

Subvenciones

Por otra parte la preocupación de los comerciantes sigue concentrándose en las subvenciones. De hecho los socialistas denuncian que «nada se ha vuelto a saber de las ayudas prometidas por el Ayuntamiento para este sector y que preveía la subvención de tasas como la de la basura, el agua, o dar exenciones del IBI durante el periodo de obras».

De esta forma, los comerciantes de la calle Colegio Naval Sacramento y Faustino Ruiz se están planteando la redacción de un escrito de protesta para exigir que tales medidas, en el caso de que salieran adelante, sean concedidas también para los establecimientos de las calles colindantes, ya que aseguran que las obras del tranvía afecta a sus negocios.

Por ello, el portavoz del PSOE, Fernando López Gil, pide la «convocatoria urgente de la Mesa del Comercio en la que el Gobierno local presente las medidas a adoptar para compensar a este sector. Un dinero que no puede salir de la subvención de 90.000 euros que ya se concede».