ARREGLO. Ciudadanos comprando ayer en el mercado San Antonio. / S. S.
SAN FERNANDO

Una solución, una petición

El Mercado de San Antonio abrió ayer sus puertas con los puestos reformados pero con la misma apariencia

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El Mercado de San Antonio abrió ayer sus puertas con un planta baja totalmente reformada. El lunes permaneció cerrado para que los carniceros que habían sido reubicados en la segunda planta para realizar unas mejoras en sus puestos que en un principio no estaban previstas, volvieran a sus lugares habituales.

Pero ayer no hubo celebración en la segunda plaza de abastos de la ciudad. Los detallistas consideraron que pese a la reforma interior aún quedaban muchas cosas por hacer. Entre ellas el arreglo de la fachada exterior, a la que, «entre otras cosas, le falta una nueva capa de pintura, preferiblemente de otro color para que se note el cambio», aseguró Andrés Barba Torrejón, presidente de los detallistas.

Otra de las demandas de estos comerciantes es un aparcamiento para que los ciudadanos puedan acudir al mercado sin problemas, en vez de a otras superficies de mejores accesos. Se repite uno de los problemas que más padece el colectivo de comerciantes del centro de la ciudad. Sus esperanzas se temporizan en el mes de septiembre, cuando esperan que el equipo de gobierno «cumpla su promesa y establezca la zona azul en las intermediaciones que llevamos más de un año y medio solicitando».

La crisis general también se ha dejado notar en los mercados. En el de San Antonio mantienen sus clientes habituales pero tienen la esperanza de incrementar el número con todas las mejoras que están llevando a cabo. Es el caso de los nuevos puestos con las últimas tecnologías sanitarias que «también nos han costado a nosotros un buen pellizco». Las instalaciones disponen de neveras, vitrinas, congelador y todos los mostradores donde se colocan los alimentos a la vista del cliente tienen cámaras de frio para su conservación.

Pese al descenso de las ventas y el encarecimiento de la vida en el mercado San Antonio aseguran que lo que no bajará es la calidad de los productos.