Urbanismo no dará licencia a los pisos sin las zonas comunes

Los vecinos de Jardines de la Universidad que llevan una década a la espera de que culminen las obras de las zonas comunes de su urbanización ya saben que el Ayuntamiento de Jerez no va a mirar hacia otro lado en este conflicto que les enfrenta a la promotora Espartinas Hogar 2000 -la antigua Hogar Noble-, que el pasado mes de julio volvió a paralizar los trabajos sin terminar la piscina y los jardines, entre otras cuestiones.

Así mismo se lo transmitieron ayer en la Delegación de Urbanismo al presidente de la comunidad de propietarios de este residencial cuyos problemas saltaron por primera vez a la luz pública en 2004, cuando los propietarios colgaron pancartas en sus ventanas y balcones para denunciar la «estafa» de los promotores.

De este modo, el delegado de Urbanismo, Juan Pedro Crisol, reiteró ayer su compromiso con los vecinos de la urbanización Jardines de la Universidad, a los que ya en el mes de febrero les adelantó que el Ayuntamiento haría lo que estuviera en su mano para darles una solución.

También en aquel entonces, Crisol dejó claro a los propietarios de Jardines de la Universidad que la promotora no podrá entregar los nuevos pisos de renta libre que construyó bajo el nombre de Residencial 5 Soles, y que se levantaron el los terrenos donde estaba prevista en un principio una nueva fase de VPO que cerraba la primera urbanización.

Según recalcó ayer el delegado, «la licencia de primera ocupación de la última fase de la promoción no se concederá hasta que finalicen las obras de las zonas comunes, entre las que se encuentra la piscina que estos vecinos no han podido disfrutar desde que adquirieron sus viviendas, lo que en la mayoría de los casos se produjo hace ya muchos años».

Crisol también señaló que la empresa promotora, Espartinas Hogar 2000, ya tiene constancia por escrito de esta circunstancia a su petición de la licencia de primera ocupación para el último bloque de la urbanización, que actualmente se está finalizando de construir. «Las administraciones, y entre ellas el Ayuntamiento, tienen las competencias y el poder que tienen. No podemos tomar ninguna acción coercitiva que obligue a la finalización de unas obras. Pero eso no impide que seamos sensibles en un problema histórico que afecta a un buen número de vecinos y que estemos tratando de atender a sus demandas en la medida de nuestras posibilidades», añadió el responsable de Urbanismo.

Dentro de las tareas de mediación desarrolladas por el Consistorio, la próxima semana hay convocadas dos reuniones. Así, el miércoles están citados los representantes de la promotora, y el jueves serán recibidos los representantes de los vecinos de la promoción. «Nuestro papel como Ayuntamiento no puede ser otro que el de escuchar a ambas partes y tratar de defender los intereses de aquella que pueda ser considerada más débil, estableciendo los mecanismos de protección de sus intereses que estén en nuestras manos. Pero no podemos ir más allá. Los vecinos saben que estamos haciendo lo posible en un asunto que entendemos que es enormemente desagradable pero que responde a un conflicto entre particulares en el que el Ayuntamiento tiene límites a su actuación. Unos límites entre los que sí se encuentra nuestro compromiso de no conceder la licencia de primera ocupación del bloque restante de la promoción en tanto no finalicen las obras pendientes en el entorno de la piscina», concluyó Crisol.

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