Brochazos de protesta

Si nadie lo hace por ti, hazlo tú mismo. Eso debieron pensar ayer algunos vecinos de La Granja que decidieron pasar la mañana del sábado arreglando con sus propias manos los desperfectos que hay en su barriada y que «el Ayuntamiento, que es quien debería realizar este trabajo, no ha acometido», explicaba ayer el presidente de la comunidad de propietarios de la Cuarta Fase de este barrio, Francisco Montero.

Unos cuantos kilos de pintura y su propia mano de obra fueron la forma de reivindicar a los representantes políticos, en particular a la delegada municipal de este Distrito, Irene Canca, que los vecinos de La Granja «están implicados con su barriada y quieren ver cómo ésta mejora, se adecenta y no se queda estancada».

Montero y una veintena más de vecinos pintaron ayer algunos cerramientos de sus bloques que estaban en muy mal estado, y advirtieron de que «vamos a seguir con este tipo de actos, porque los políticos no pueden seguir ignorando todo lo que hay por hacer en La Granja». Estos ciudadanos dejaron claro ayer que «queremos demostrar que aquí no se está haciendo nada, que ni siquiera han atendido nuestra petición de que nos pinten algunas zonas con desperfectos y que la marea negra no va a llegar aquí pese a que nos lo habían prometido y que hace mucha falta».

Por esa falta de actuación del Ayuntamiento, y porque «preferimos pagar de nuestro propio bolsillo la pintura antes que permanecer callados mientras siguen sin atendernos», ayer muchos de los jerezanos que viven en La Granja dejaron la playa para otro día y se pusieron el mono de trabajo.