BISAGRA. Ángeles Polanco tiene en su mano un hipotético cambio de gobierno con su voto. / LA VOZ
Chiclana

El PSA pide a Marín ocupar varias de las delegaciones que «no funcionan»

La única edil de este partido tensa aún más las relaciones en el cuatripartito

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El pacto cuatripartito que ostenta el gobierno en Chiclana se resquebraja a pasos agigantados. Justo en el día en que el alcalde, Ernesto Marín, había anunciado que daría a conocer los cambios en las delegaciones de su ejecutivo, este medio ha podido saber que el PSA, uno de los cuatro partidos que integran esta alianza desde las pasadas elecciones municipales, está dispuesto a tensar la cuerda hasta, si es necesario, romperla y pactar con el PSOE.

Su única concejal en el Ayuntamiento local, Ángeles Polanco, exigió a Ernesto Marín antes de la pasada Feria de San Antonio un cambio de timón en algunas delegaciones que a su entender no funcionan de la forma correcta.

Semanas después, hace sólo unos días, saltaba a la opinión pública el cisma interno de IU y este partido expulsaba a su número tres, Nadine Fernández. Entonces el PSA retomaba con Marín estas conversaciones en el seno del gobierno para cambiar a los titulares de algunas delegaciones e intercambiar responsabilidades políticas entre PP, IU, PA y PSA.

Sin embargo, estas negociaciones no han cuajado aún. En la tarde-noche del pasado martes Marín se reunió con los cuatro portavoces del cuatripartito y volvió a escuchar las quejas de Polanco, que ratificaba ayer a este medio ayer «que en efecto hay algunas parcelas municipales en las que entendemos no se está trabajando lo suficientemente bien como para estar satisfechos desde este gobierno de coalición».

Más claro, agua. Ángeles Polanco tensa aún más la cuerda y anuncia no tener prisa, pero sí muy claro lo que quiere. El Partido Socialista de Andalucía (que cuenta sólo con un concejal, pero que en estos momentos podría facilitar una hipotética moción de censura contra Marín con su voto), considera que «se está trabajando de espaldas a los ciudadanos en determinadas áreas» y recuerda que «un pacto de gobierno como éste no tiene sentido si no se cambia la política que se está aplicando en algunos temas».

A partir de ahora la pelota está en el tejado del alcalde de Chiclana, que al parecer habría dicho no a las exigencias del PSA y su única edil en el cuatripartito, de ostentar algunas de esas delegaciones más conflictivas.

Reparto de delegaciones

La propia Polanco aseguró ayer estar dispuesta a «volver a negociar en el mes de septiembre» y confesaba a LA VOZ su malestar por «no ser respetada por algunos cargos de confianza ni tener el peso que deberíamos tener».

Entretanto, fuentes municipales aseguran que hoy se conocerá el reparto final de delegaciones que Marín hace tras la salida de Nadine Fernández del gobierno.

Todo apunta a que IU mantendrá la delegación de Parques y Jardines que ostentaba la ahora concejal no inscrita, o que el área de Participación Ciudadana también quedará bajo la dirección de IU. Falta por conocer quién dirigirá Personal, que podría pasar a manos del PP, partido mayoritario en el gobierno.

El resto de cambios que había anunciado Marín días atrás podrían quedar en nada; habrá que esperar para ver una remodelación a fondo a que se resuelva la disputa interna de poder que mantienen los cuatro partidos de este gobierno.