Los vigilantes demandan la apertura a la circulación de la calle Larga y el Arenal

El Sindicato Profesional de Vigilantes ha insistido en la necesidad de que para los servicios de alta seguridad que realizan estos profesionales se faciliten los accesos de los mismos a las entidades bancarias, a fin de evitar situaciones como la sucedida ayer en el Viso del Alcor, que costó la vida a un vigilante que realizaba un transporte de fondos.

A través de un comunicado, el colectivo recordó que día a día «nos jugamos el tipo en las calles de nuestras ciudades en beneficio de una sociedad que disfruta de nuestros servicios», por lo que «no entendemos posturas como la del Ayuntamiento de Jerez, que antepone el cuidado de una baldosas, por muy caras que sean, a la seguridad de los trabajadores y peatones».

Cabe recordar que el sindicato ya mostró su indignación a principios del mes de julio por la nueva normativa municipal, que prohíbe la circulación en la calle Larga y la plaza del Arenal. A juicio de los profesionales, esto supone un grave riesgo para ellos, que al no poder acceder en los furgones a algunos bancos y cajas, han de realizar un trayecto a pie con el botín.

Por ello, y en aras de evitar situaciones como la que ocurrió ayer en el Viso, piden nuevamente al delegado de Seguridad, Movilidad y Recursos, Juan Manuel García Bermúdez, «que nos permita circular por la calle Larga y la plaza del Arenal, ya que nuestra exigencia no es un capricho, sino una necesidad de seguridad».

La tragedia sobrevino en la localidad sevillana cuando dos guardias de la empresa Prosegur fueron tiroteados cuando se encontraban trasladando sacas de dinero hasta una entidad bancaria. Uno de ellos, de 48 años, falleció en el hospital Virgen del Rocío de la capital hispalense, donde no pudo recuperarse de las lesiones causadas por los disparos.

Por otra parte, su compañero se encuentra ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Virgen de Valme, donde el personal sanitario se dedicó a valorar ayer su estado, si bien las primeras informaciones apuntaron a que su vida no corre peligro.