ANDALUCÍA

Muere tiroteado un vigilante de seguridad durante un atraco en un pueblo de Sevilla

Un guardia de seguridad resultó muerto a tiros y otro herido durante un atraco ante las puertas de una sucursal bancaria situada en el centro de El Viso del Alcor (Sevilla). La Guardia Civil busca ahora al presunto asesino, que llevó a cabo el asalto con la cara cubierta por un casco y huyó del lugar en una motocicleta negra de gran cilindrada. El botín alcanza los cien mil euros.

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Los hechos tuvieron lugar a las 10:40 horas de la mañana en la calle Real, en pleno centro del municipio sevillano y junto a la entrada al mercado de abastos, repleto de gente a esa hora. Los dos agentes, pertenecientes a la empresa Prosegur y de 48 años de edad, acababan de salir de una oficina del Banco de Santander con varias sacas de dinero, aún sin cuantificar.

Ambos atravesaban el mercado para dirigirse al furgón blindado, a 20 metros de la entidad, cuando un hombre cubierto con un casco se acercó hacia ellos y les disparó a bocajarro siete balazos. Los vigilantes se desplomaron, momento en el que el agresor cogió las sacas y huyó de la zona en una motocicleta de gran cilindrada en el que, según algunas fuentes, podía estar esperándole otro cómplice para ayudarle en la huida.

Los servicios de emergencias sanitarias 061 acudieron inmediatamente al lugar, gracias al aviso de un farmacéutico que presenció el atraco. Uno de los guardias privados, Jerónimo L. P., recibió dos disparos en el pulmón y el hígado.

Ante la gravedad de las heridas fue evacuado en helicóptero al hospital Virgen de Rocío de Sevilla capital, donde falleció poco después del mediodía al no poder frenar la hemorragia de la herida en el hígado.

El fallecido era padre de dos hijos de corta edad y trabajaba habitualmente en los controles de seguridad en la televisión autonómica andaluza, aunque en los días de descanso solía hacer servicios extraordinarios en furgones blindados, como en esta ocasión.

Su compañero, Diego C., también de 48 años, presenta al menos cinco impactos de bala en el brazo, en la pierna y en la ingle. Fue trasladado al cercano hospital comarcal de Valme, donde permanece ingresado en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) aunque no se teme por su vida.

Fuentes de la investigación confirmaron que el botín sustraído por el atracador alcanza los cien mil euros.