SUBLIME. La selección de Pedro Moreno estuvo a la altura de las circunstancias. / NURIA REINA
balonmano playa

Las chicas de plata

Las españolas no pudieron hacer nada frente a la poderosa selección croata El Mundial de Cádiz finalizó con un estadio entregado al equipo femenino

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

No pudo ser. El sueño que comenzó el pasado miércoles con la apertura del Mundial tuvo un parentésis de 20 minutos ayer. La final no estuvo a la altura de lo que las chicas de la selección femenina de balonmano playa se merecían. Las croatas, mucho más descansadas que sus rivales, marcaron el ritmo del partido y tuvieron en los árbitros y la previa victoria masculina a sus mejores aliados. Aún así, España dio la cara y bordó una primera parte que invitaba a soñar con la proeza. Con una defensa firme, en la que Pedro Moreno alineó a todas sus torres, a las croatas les costaba entrar y sólo Botica hacía daño por el flanco izquierdo. Trigueros, como ya hiciera ante Brasil, agarraba todo lo parable y, a veces, lo imposible. Con López y Martínez fuertes atrás, para ganar sólo necesitaban que el ataque no fallara.

Y no falló. La conexión María Fernández-Noelia Fornell tardó algo en aparecer, pero lo hizo. Fernández primero y luego la gaditana Fornell con uno de sus magníficos giros ponían el marcador ajustado en 6-4 para las croatas. Y cuando mejor estaba España, y más empujaba la afición, apareció el factor silbato. Hasta cuatro ataques que acabaron en gol invalidaron a la selección femenina. La joven María Fernández se desesperaba, pero Anna Pi tiraba de casta y contestaba con dos golazos a las decisiones desfavorables. Pero Croacia tiene mucha experiencia y eso es un tanto a favor. Con el 11-10 en el marcador, y a falta de 16 segundos, las balcánicas volvieron a realizar un ataque al borde del pasivo que a gritos pedían desde la grada. Samarinec no fallaba: 13-10 y medio partido para Croacia. En la segunda mitad la agonía fue rápida. Dos de las estrellas de este torneo que no habían aparecido de manera estelar aún en la final, lo hicieron. Ivana Lovric y Petra Starcek fueron las encargadas de rematar a la selección española tan agotada ya por la pérdida en la primera jornada del torneo de Marta Mangue: 14-6 y poca historia en esta segunda parte. Con el pitido final del partido continuó el sueño. Las chicas de oro de Pedro Moreno hicieron ayer algo impensable hasta ahora en la historia del balonmano español. La primera selección femenina de este deporte en cosechar una medalla. Han marcado el futuro.