Morales asegura que la venta es inminente y no descarta seguir vinculado al Xerez

Lo que parecía un punto y final al culebrón, que se ha convertido la compraventa del Xerez, pasó a ser ayer un punto y seguido más a esta interminable historia a tres bandas, donde uno de sus principales protagonistas, el actual presidente, salió a la luz pública para valorar cómo se están desarrollando los acontecimientos.

Aunque Joaquín Morales confirmó a los cuatro vientos que la venta ya es un hecho al cien por cien, lo cierto es que restan pequeños flecos por pulir de manos de la parte compradora, cuya cabeza visible es Francisco Garrido, que está a la espera de conseguir el aval bancario que le permita desembarcar en la nave xerecista. El gestor nazareno aseguró que «no se ha vendido todavía porque falta el dinero. Este hombre lo está buscando, lo tiene muy enderezado ya y esperemos que esta semana esté. Tenemos al mejor comprador posible, es buena persona y está apoyado por el Ayuntamiento».

Por tanto, el traspaso de poderes puede ser cuestión de horas o días, pero tirando de antecedentes, tampoco sería descabellado hablar de semanas. En este sentido fue explícito al señalar que «se tiene que hacer porque de lo contrario más de uno tendría que irse de Jerez. Hay personas que han dicho sí y ya, pero han pasado tgres semanas». El empresario sevillano no quiso individualizar esta responsabilidad y dijo que se refería «a todo el mundo y no a nadie en particular».

Cuando se le sugirió si hablaba de la alcaldesa Pilar Sánchez, aclaró que no, «sé que ella está muy implicada porque hablamos a diario, y me consta que este tema le quita el sueño. Sigo confiando en la alcaldesa y en Francisco Garrido, y estoy convencido de ello. Sé que la cosa va por buen camino, lo que pasa es que se trata de una operación importante y hay que ir paso a paso para que luego no haya nunca un yo pensé. Que esté todo muy clarito. Si este hombre compra, como va a comprar, se le han puesto las cosas muy claritas, no varía ni una coma lo que se había hablado con ellos, igual que se hizo con los anteriores compradores, pero la diferencia es que este hombre si es comprador, y los otros no».

Gestiones de su equipo

Sin embargo Morales quiso aclarar en la sala de prensa de Chapín que las gestiones para renegociar la deuda con Hacienda y la Tesorería de la Seguridad Social es obra de su equipo, en contreto de Antonio Fernández Monterrubio, pues «eso ya estaba hablado y lo que Paco quería saber es que si se mantenía la misma línea. Seguramente con un pago inicial nos desbloquearán la subvención, y nos darán cinco años, que es lo que hacen con todos los clubes. Eso es lo que nos ha tenido un poco asfixiados, y aunque con dificultades hemos podido pagar algunas deudas».

Además anunció que todo está hablado para que haya una línea continuista en la entidad azulina, es decir que el grupo de Garrido seguirá confiando en los hombres fuertes actuales porque «él no es un hombre de fútbol y confía en la gente que hay en el club. Con Francisco Garrido va a seguir la mismas personas que están trabajando ahora, es decir que lo que va a cambiar es el presidente y el dueño de las acciones. Él habla prácticamente todos los días con el míster, de hecho anoche mismo cenaron los dos y está al día de todo. Por eso dice, que lo que se hagan ahora está bien hecho ».

Es más, el presidente actual ni siquiera descarta seguir trabajando en el Xerez, aunque dejó claro que no seguiría ocupando el mismo cargo. En este sentido señaló que «si Joaquín Morales ha sido capaz de perder cinco millones de euros de su bolsillo, siendo un empresario pequeño, por el bien del Xerez, y ha sido capaz de aguantar aquí cuatro años, con las perrerías que me han hecho, cualquier cosa que me pidan la voy a hacer y lo demostraré, como lo estoy haciendo».

Para que la maquinaria azulina pueda seguir funcionando «hace falta dinero. Este hombre viene acompañado de unos socios que tiene que traer el dinero para empezar a afrontar pagos. Se ha visto todo. Creo que no ha variado ni una coma de los datos que le dio Antonio Fernández. Se ha estado en la Seguridad Social para comprobar lo que ya tenía tratado y hablado con el organismo público, para que el abogado de este señor viera que todo es verdad, al igual que en Hacienda, con la que nosotros ya teníamos acuerdos porque llevamos toda la temporada tratando nuevos periodos y fórmulas de pago».

Pese a todo, la intervención de Morales en la matinal de ayer sonó a antesala de despedida y quizás por ello repasó su periplo azulino destacando que «me quedo con los momentos mágicos que he vivido en el club. Eso lo compensa todo». Sin embargo explicó que «mi llegada al club fue una locura y lo he pagado con creces, con mucho sufrimientos». Lo que quiso dejar claro es que «ocurra lo que ocurra el Xerez va a seguir adelante. Si dado el caso esta operación no saliera, que no va a ser el caso, no voy a dejar el barco tirado, nunca abandono, lo he demostrado mil veces, porque me han apretado y he aguantado como un león». El presidente reconoció que «esperaba ganar dinero en el mundo del fútbol, como todos los que se meten en el fútbol que no nos dedicamos a la construcción las miras van puestas en ingtentar hacer algún tipo de negocio». Al ser preguntado sobre si se apresuró a la hora de anunciar la venta del club hace tres semanas, Morales explicó que «no porque cuando quedo con un señor en algo y le doy la mano pienso que hecho está. Lo que ocurre es que no esperaba que iba a tardar en conseguir el dinero, aunque es una cantidad importante, porque este hombre (Garrido) es un constructor consolidado y está recibiendo un capital a través de unos socios. Algunas cosas no le han salido como esperaba y de ahí el retraso, pero sé que está avanzando a pasos agigantados».

Por otro lado, el gestor nazareno dejó claro que las órdenes para firmar jugadores y realizar todas las operaciones actuales las está dando él, refiriéndose a los componentes de su equipo. «Es que no las puede dar otro. El que manda soy yo para lo bueno y para lo malo, es el que se lleva los porrazos y el que acierta muy de vez en cuando». Pese a todo reconoció que hay línea directa con la parte compradora, porque hablamos con ellos (el grupo de Garrido), hay una muy buena relación, pero como este hombre, igual que cuando yo llegué sabía cero de fútbol, se deja llevar por los que saben, que son el míster y Miguel Ángel y su equipo».

No obstante, reconoció que la actual situación «está perjudicando considerablemente al equipo, porque existe una incertidumbre y los futbolistas, como es normal, quieren saber si van a cobrar los días 1, aunque si es conmigo será difícil, pero lo importante es que acabarán cobrando».

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