La internacionalización pone a salvo las ganancias de las grandes empresas

La crisis se ha instalado en la economía española, y las grandes compañías se esfuerzan estos días por comunicar que van a cumplir las estimaciones anuales y siguen avanzando en sus planes estratégicos. A punto de rebasar el ecuador del ejercicio, los presidentes de Telefónica, Santander, BBVA, Iberdrola y Repsol se han manifestado como si el parón no fuera con ellos. Y es que una cuota muy elevada de sus negocios está en el exterior. Ser multinacionales con centro de decisión en España tiene esas ventajas.

Pero el frenazo de la actividad interior se está convirtiendo en un lastre. Durante el mes de julio darán a conocer estas compañías sus resultados semestrales. Será un examen riguroso. La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) permite desde este año que las empresas cotizadas presenten un informe mucho más ligero al final del segundo y tercer trimestre, pero les exige rendir cuentas exhaustivas a mitad del ejercicio.

Telefónica

Telefónica camina a velocidad de crucero. Su presidente, César Alierta, aseguró en Zaragoza que la operadora está acostumbrada a «ir con el viento» en todos los sitios. Presente en 25 países -desde Latinoamérica a China- que atraviesan muy distintas fases del ciclo económico, la compañía ha confirmado los objetivos para todo el año, lo que implica que los ingresos crezcan entre el 6% y el 8%, y un avance del resultado de explotación que estará entre el 7,5% y el 11%.

Sin duda, la asignatura más difícil para Telefónica será este año el negocio 'nacional'. Que España atraviese una etapa de fuerte parón económico no ha obligado a una revisión de los objetivos porque, según su presidente, Telefónica cuenta con una serie de factores que estimulan el crecimiento del negocio. Aunque se vendan menos pisos, lo cierto es que se siguen formando miles de hogares, que la penetración de la banda ancha va como un tiro y que la conectividad de los ciudadanos -y en especial de los clientes de telefonía móvil- sube también a fuerte ritmo, comentó. La operadora cuenta, además, con el efecto del lanzamiento del iPhone, que Telefónica sacará en exclusiva en España desde el 11 de julio.

Banco Santander y BBVA

Con la vista en América, ante la junta de accionistas, el presidente Emilio Botín anunció que Banco Santander ganará este año más de 10.000 millones de euros, sin extraordinarios, a pesar de la crisis. Que 2008 pueda ser un buen año -argumentó- lo avalan las proyecciones de Abbey, en el Reino Unido y las expectativas de que la compra de Banco Real, en Brasil, adquirido en el marco de la operación de ABN-Amro, empiece a rendir frutos.

BBVA no hace públicas sus previsiones anuales. El presidente, Francisco González,acaba de declarar que las dos principales realidades del banco, España y Latinoamérica, siguen mostrando «una gran fortaleza», unidas a la posición en Estados Unidos y Asia.

¿Qué proyectan los dos grandes para su negocio en España? Hasta que lleguen mejores tiempos, se esfuerzan porque la tecnología y la externalización les ayuden a ajustar sus costes y centran su estrategia comercial en 'robar' al competidor los depósitos, la domiciliación de nóminas, los mejores clientes y las hipotecas más solventes.

Repsol YPF

Repsol YPF está en otra galaxia. La escalada del crudo favorece su negocio, pese a que no pueda trasladar a precios finales el impacto total del brutal ascenso de esta materia prima. La volatilidad del petróleo es la justificación que utilizó el presidente Brufau ante la reciente convención de ejecutivos para no concretar la proyección de resultados. Baste decir que la programación de la compañía para el periodo 2008-2012 se elaboró con la hipótesis de 55 dólares el barril, cuando ahora mismo ronda los 140. La nueva trayectoria del crudo se reflejará en mejores resultados... si el canje euro-dólar, la otra gran variable, no juega en contra. El mercado del petróleo opera en billetes verdes, mientras la petrolera tiene en la divisa europea su moneda operativa.

Iberdrola

Iberdrola se aupó a la lista de las grandes cotizadas españolas tras la compra de Scottish Power y la salida a Bolsa de su filial de Renovables. Con su negocio en España estrechamente vinculado al marco regulador, la compañía eléctrica cada vez se proyecta más al exterior. Ya el pasado jueves anunció el presidente que dos terceras partes de la inversión de 18.800 millones de euros que Renovables proyecta para el periodo 2008-2012 se localizarán fuera de España (buena parte en Estados Unidos, y lo demás en el resto de Europa). Las ganancias evolucionarán de acuerdo con lo previsto.