Ejecutado en Japón el asesino caníbal

Se trata de Tsutomu Miyazaki, quien entre 1988 y 1989 asesinó y mutiló a cuatro niñas, con edades comprendidas entre los cuatro y los siete años, y llegó incluso a comerse parte de sus cuerpos, a beberse su sangre y a dormir con el cadáver de una de ellas.

Por aquellos horrendos crímenes, que conmocionaron al archipiélago nipón, Miyazaki fue condenado a muerte en 1997.

Además, este espeluznante caso alertó sobre los peligros del 'manga', los famosos cómics y vídeos plagados de sexo y violencia que son sumamente populares en Japón.

Y es que la Policía encontró en la casa de Tsutomu Miyazaki, apodado el 'caníbal de Saitama', unas 6.000 películas de este tipo plagadas de escenas de horror.

De hecho, su crueldad era tal que hasta llegó a quemar los restos de una de sus víctimas y luego los dejó en una caja de cartón en la puerta de sus padres, escribiendo también cartas a la Policía retando a los investigadores del caso a que lo detuvieran.

Durante estas dos últimas décadas, el caníbal del 'manga' no ha mostrado arrepentimiento en ningún momento y sólo ha admitido que las niñas fueron asesinadas por un 'hombre rata', que plasmó en un dibujo influido por su afición al cómics. Miyazaki ni siquiera mostró cierto pesar en 1994, cuando su padre, hundido por sus atrocidades, se suicidó.

Junto al 'caníbal', fueron ajusticiados Shinji Mutsuda, de 45 años y condenado por robo y asesinato, y Yoshio Yamasaki, de 73, por matar a dos personas.