Ella no baila sola

El corazón de María empezó a latir con los últimos aplausos que su madre recibió en el Falla la primera vez que presentaba un espectáculo de su recién estrenada aventura. Un espectáculo que resultó una confirmación de que con ganas y trabajo se consiguen los sueños, y que las apuestas grandes tienen grandes riesgos, pero también grandes satisfacciones. Porque abrir una escuela de danza en Cádiz tenía más de aventura que de negocio, y aunque lo sabía y sabía que no era fácil para una bailarina convertirse en empresaria, supo sacar adelante un proyecto que en apenas dos años se ha convertido en un referente en la ciudad. Un referente empresarial y un referente cultural, lo que en estos tiempos que corren tiene más de milagro que de otra cosa, que no todo es hostelería y turismo en esta tierra de los eternos proyectos. Y Celia Delgado lo sabe porque son más de ciento cincuenta niñas las que bailan cada día en La Tournée, que así es como llamó a su escuela rompiendo, una vez más los esquemas establecidos. Ciento cincuenta niñas que se calzan las zapatillas de ballet y que imaginan, etéreas, la vida a través de un espejo.