El proyecto 'CulturCad' permite restaurar una parte del Castillo y destinarlo a Centro Cultural

El presidente de la Mancomunidad de la Sierra, Alfonso Moscoso (PSOE), y el alcalde de Bornos, Fernando García (PP), inauguraron ayer el Centro Cultural Castillo Palacio de los Ribera, que se ha ejecutado con fondos del Proyecto CulturCad. En concreto, se ha acondicionado una parte del Castillo del Fontanar (Palacio de los Ribera), que es de origen árabe. El proyecto ha contado con un presupuesto de 245.500,23 euros.

Estas obras son fruto de un convenio entre la institución supramunicipal, el Instituto de Empleo y Desarrollo Tecnológico de la Diputación de Cádiz y el Ayuntamiento de Bornos, gracias al mismo se ha rehabilitado la planta alta del Castillo Palacio en sus alas norte y oeste, para su adecuación como oficinas municipales y como salas expositivas de un museo. Asimismo, se ha recuperado la escalera de acceso principal ubicada en el ala este y las dependencias existentes en la entreplanta de la Torre del Homenaje que da a la Plaza Primero de Mayo. Todo el conjunto está dotado de las instalaciones de electricidad y de telecomunicaciones necesarias para el desarrollo de las actividades que se pretenden establecer en las distintas dependencias.

El alcalde destacó que la intención del Ayuntamiento es la de «recuperar para el uso de los vecinos este magnífico edificio y su jardín, que tiene más de 400 años de historia, aunque siempre respetando cómo era en sus orígenes». Mientras que Moscoso añadió que esta recuperación de este edificio, convirtiéndolo en Centro Etnográfico, «viene a consolidar la oferta turística de la comarca de la Sierra». Concluyendo que «teniendo en cuenta que la comarca es un gran museo medioambientalmente, tenemos la obligación de dotar a nuestros municipios de estos edificios para que se pueda entender la historia y características de los pueblos».

Historia

El Palacio Castillo de los Ribera fue restaurado y transformado en palacio de estilo plateresco en el siglo XVI. Todas estas obras de restauración y transformación fueron realizadas por artistas italianos y españoles que fueron contratados por la familia Enríquez de Ribera en los siglos XVI y XVII. El Castillo-Palacio fue propiedad de la Casa Ducal de Medinaceli hasta el año 1945, en que lo adquirió José Bohórquez Gómez. En 1949 fue adquirido por el Ayuntamiento.

La instalación cuenta con un jardín renacentista, escondido entre muros, que es un espacio verde que data del siglo XVI. El Marqués de Tarifa, a su regreso de un viaje por Italia e influenciado por la estética de la época que allí se vivía, mandó la proyección de este jardín a artistas especializados. Incluso el viejo castillo de defensa se convirtió en un bello palacio. Hoy en día, tras una afortunada restauración, llevada a cabo por el duque de Segorbe, el jardín es un ejemplo paisajístico cuya propiedad municipal propicia su permanente apertura al público. Cercado por un murete almenado, decorado por especies trepadoras, con puertas y ventanas hacia la calle, el espacio verde mantiene interiormente una estructura a la italiana: suaves desniveles unidos por escaleras convergentes en un eje geométrico lineal que se une a otros por plazoletas circulares.

sierra@lavozdigital.es