MENUDO Y CUSCÚS. La variedad de los platos fue notable.
Jerez

Intercambiando cultura con cuchara

Solidaridad celebró ayer la primera Convivencia gastronómica intercultural 'Sabores del mundo'

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El cine, la literatura, la música o el arte son transmisores de cultura y de culturas. La tortilla de patatas, el cuscús y los tostones de plátano, también. Ésa es la idea que llevó a Solidaridad -auspiciado por la Confederación Andaluza de Asociaciones de Vecinos (CAVA)- a emprender ayer una original convivencia intercultural gastronómica llamada Sabores del mundo. Fueron más de 20 los platos presentados en la Escuela de Hostelería, que fue el escenario elegido para la cita.

La berza jerezana de Natividad Jiménez, el plato llamado Moros y cristianos de Mercedes Douglas (Cuba) y el fatir, de Souher Zein (Siria) fueron los tres platos ganadores del concurso. Además del diploma por haber participado, los premiados se llevaron una placa conmemorativa. Entre los presentados hubo calamares rellenos, albóndigas, ensaladilla de verduras y frutas (Cuba), tortillitas de maíz, yuka (Colombia), menudo y cuscús (Marruecos). Entre los postres había roscos de azúcar y tarta de queso.

No era la primera vez que Souher Zein ganaba un concurso de estas características y aún así siguió la degustación del jurado -formado por Unai Sánchez, Santiago Casal, José Manuel Jiménez y Dora Nidia Quevedo- en todo momento, atenta a los comentarios y los gestos de cada uno al probar su creación. «Estoy muy contenta», dijo cuando su fatir fue galardonado. «Lleva patata, berenjena, carne picada, cebolla y bechamel. Va todo por capas y se mete en el horno. Es un plato cotidiano en Siria», explicó. Además, Souher -que lleva 17 años viviendo en Jerez- presentó un postre típico de su país: unos sabrosos dulces elaborados artesanalmente con frutos secos y hojaldre.

En casa del joven marroquí Faîsal Oubida «hacemos más comida de mi país que española», aunque asegura que le gusta la tortilla de patatas. Llevan un año y cuatro meses en la ciudad y presentaron ayer al concurso uno de los platos más atractivos: el cuscús. Por fortuna, en Jerez «encontramos todos los ingredientes necesarios para nuestras comidas».

El secreto del chef

El certamen contó también con una nutrida representación de vecinos jerezanos que demostraron sus habilidades culinarias y disfrutaron de un buen rato haciendo nuevos amigos. Vecinos de San Benito, de Cerrofruto o de Parque Atlántico compartieron un sábado fuera de lo común. Fue el caso de Francisco Javier González, que presentó junto a su mujer, platos tradicionales con un toque innovador. Se trataba de unos buenos fideos con gambas y un revuelto de gambas, pulpo y setas: «Es la primera vez que participo en un concurso de gastronomía y éste me parece además una buena iniciativa para conocer otras culturas». Este jerezano de Cerrofruto aseguró que en la cocina «me apaño» y, desafiando las normas de todo chef, desveló la clave de su revuelto: «Aceite de oliva, setas, ajo y pimiento molido».

«Cuando uno conoce otros tipos de gastronomía, se le abre la mente y empieza a querer saber más de ese lugar», aseguraba la vocal de inmigración de la CAVA, Dora Nidia Quevedo, que formó ayer parte del jurado. «Para nosotros es una satisfacción que Jerez haya respondido así porque hace poco tiempo que se han integrado en la Confederación», explica esta colombiana que lleva cuatro años en Andalucía trabajando con los recién llegados. «La gastronomía es algo que une a las personas porque no se trata sólo de un plato sino de los ingredientes, de cómo se elabora... Actividades como éstas son las que más integran a los inmigrantes en las sociedades de acogida», continuó.

La Escuela de Hostelería fue el lugar elegido para esta convivencia. «Estaremos aquí para cada vez que queráis hacer concursos como éste», confirmó Unai Sánchez en representación de la institución jerezana. Esta iniciativa ha contado con el apoyo de la Dirección General de Bienestar Social y su titular, José Manuel Jiménez, destacó ayer que «es de las actividades más bonitas porque a través de la gastronomía convivimos y nos manifestamos». Por su parte, el presidente de la Federación Local de Asociaciones de Vecinos, Solidaridad, Santiago Casal, hizo especial hincapié en que «tenemos un punto de asesoramiento de inmigrantes para que se incorporen al tejido asociativo de la ciudad». Aunque Sabores del mundo está concebido como un concurso, lo importante era «compartir vivencias y experiencias y si de paso nos llenamos el estómago con buenas comidas, mejor que mejor».

vmontero@lavozdigital.es