Los afectados por el 'cerrojazo' de Jerecom radicalizarán sus protestas en próximos días

El cierre de Jerecom causó un enorme varapalo para decenas de acreedores que en la actualidad hacen verdaderos malabares para poder sobrevivir. Por ello, desde hace semanas se han lanzado a las calles para reivindicar lo que les pertenece: cantidades económicas nunca cobradas por trabajos que llevaron a cabo con la constructora en la ciudad.

No obstante, y a pesar de las continuas protestas que están protagonizando, la situación ha día de hoy es la misma que hace cuatro meses y por ello mañana tienen previsto reunirse para estudiar y elaborar un nuevo calendario de protestas que hará que su presencia se intensifique en la ciudad, especialmente durante el Gran Premio de Motociclismo, ya que durante «estos días Jerez es un escaparate internacional y es bueno que la gente sepa que esta ciudad también tiene problemas muy serios», como indicaron ayer los afectados.

De igual forma, «los siguientes pasos que llevaremos a cabo se centrarán en la paralización, con los camiones, de las obras que están realizando las empresas nacidas tras la suspensión de pagos de Jerecom, entidades que pertenecen a miembros de la familia Grimaldi y que tienen oficinas clandestinas en la calle Albadalejo, en la carretera de Arcos o en la calle Ancha de La Barca», insistieron los proveedores.

De hecho, ayer mismo, más de medio centenar de personas se congregaron en la pedanía barqueña para manifestarse y desplegar sus pancartas a las puertas de «la oficina que han abierto allí». Durante más de dos horas, los acreedores y trabajadores de esta entidad vivieron momentos de muchos nervios mientras que «alertábamos a los chavales que se acercaban hasta el local, en busca de trabajo como albañiles, del origen de esta empresa nueva».

Asimismo, desde el colectivo de afectados se quiso recalcar que «el Ayuntamiento ya está moviendo ficha y, según las últimas noticias que tenemos, han presentado ante la Fiscalía una serie de facturas dudosas procedentes de Jerecom y que se habían entregado a la vieja Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU)».

Junto a este hecho, que aún no ha sido confirmado por el Consistorio, es importante señalar que los acreedores ya están preparando toda la documentación necesaria para presentar una demanda conjunta, por la vía de lo penal, contra la constructora «para que se investigue la estafa».

El objetivo de la Plataforma es que «no se olvide que nos están engañando, robando y estafando impunemente», concluyen con notable indignación.