La inflación no cede y alcanza el 4,4% en febrero, la tasa más alta desde1995

La inflación suma y sigue, y no parece tener freno a corto plazo, lo que volverá a perjudicar a un consumo en claro retroceso. Según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), su tasa interanual se elevó una décima en febrero y alcanzó el 4,4%, su valor más alto desde noviembre de 1995, empujada por las subidas de tarifas en trasporte, carburantes y alimentos, en especial en aquellos cuya elaboración depende en alguna medida de los cereales. Respecto a enero, los precios se incrementaron dos décimas. En esta tesitura, el Gobierno admite ahora que el alza continúa del petróleo puede aplazar sus cálculos, en apariencia optimistas, e impedir que los precios se moderen en primavera.

No obstante, desde el Ejecutivo se prefiere hablar más de la inflación subyacente (que no tiene en cuenta ni los alimentos frescos ni la energía), de la que destacó que pese a crecer dos décimas el mes pasado (llega al 3,3% en tasa interanual) «se mantiene muy por debajo de la general». También valora de forma especial que el diferencial de precios con la Unión Económica y Monetaria se mantenga en 1,2 puntos, «cifra similar» a la que se registra desde la entrada de España en ella. Pero estos dos alivios no logran tapar el mal dato del Índice de Precios de Consumo (IPC), del que sólo se admite de forma escueta que «no es satisfactorio».

Alcohol y tabaco

De hecho, el secretario de Estado de Economía, David Vegara, mantuvo la previsión repetida desde hace meses por su Ministerio: la inflación empezará a ceder esta primavera hasta terminar el año en niveles «cercanos» al 3%.

Las bebidas alcohólicas y el tabaco fueron el grupo que más aumentó su coste en febrero, hasta un punto básico, por encima del 0,6% en que lo hicieron los hoteles, las cafeterías y los restaurantes. Mención especial merecen los seguros, que se dispararon un 1,3% por las revisiones anuales de sus pólizas.

El respiro mensual vino, como era de esperar en pleno período invernal de rebajas, de las prendas de vestir y el calzado, que se abarataron un 1,2% y un 1,5%. Más significativos fueronlos descensos en el pescado fresco (-6,1%) y la carne de ovino (-7%). En tasa interanual, las mayores bajadas se las anotaron las patatas y sus preparados (-8,8%). Por el contrario, en los últimos doce meses se han disparado los productos energéticos (un 13% más), y en especial los carburantes (16,7%), con un gasóleo que ya vale más que la gasolina sin plomo de 95 octanos.

En la alimentación, la leche es ahora un 27,7% más cara que hace un año, mientras que el pan, la carne de vaca y los huevos se han encarecido un 11,6%, sin olvidar las subidas en el transporte (7,3%).