«David no para de cantarle a la barriguita»

Era la primera vez que Paula Echevarría acudía a un acto público desde que anunció, por medio de un comunicado, que está embarazada. Por eso había tanto revuelo el miércoles por la tarde en el Instituto Europeo de Diseño de Madrid, donde la actriz acudió a presentar la exposición del fotógrafo Manuel Outumuro, patrocinada por Pantene Style, bajo el título: El secreto de tu estilo.

-No va a quedar otra que preguntarle cuál es el secreto de su estilo.

-Supongo que se refiere al estilo de mi pelo, que es de lo que trata esta campaña. Y ahí no sé muy bien qué contestar, porque cambio poco de peinado. No soy de hacerme cortes muy radicales ni de cambiar de color. Así que sólo me queda la opción de jugar con la melena. Y eso es lo que hago con mi pelo en este spot de laca. Una vez, por cierto, me dejé flequillo.

-Dicen que el pelo mejora con el embarazo.

-Dicen que mejora, que empeora... He oído de todo. Yo, de momento, no noto nada.

-Su marido afirma que no tiene usted náuseas, ni mareos...

-Es cierto. Estoy estupenda. Si los embarazos van a ser siempre así, me apunto a tener más. No noto nada, ni tengo antojos. Estoy siendo una embarazada muy buena y nada caprichosa.

-¿Por qué lo han hecho público tan pronto?

-Porque, para empezar, David y yo nunca ocultamos nada. Y menos una cosa que nos llena de orgullo y que teníamos ganas de gritar a los cuatro vientos. Estábamos como locos. Primero lo supieron nuestras familias y nuestros amigos más allegados. Pero en el momento en que se empieza a correr la voz y lo sabe más gente de la debida... David y yo somos dos personas que no soportamos las especulaciones acerca de nuestra vida. A mí no me gusta eso de si será verdad, no será verdad... No lo soporto. Prefiero zanjar el tema antes de que exista. No me gusta andarme con rodeos. Y, como era algo de lo que ya estábamos seguros, decidimos comunicarlo.

-¿No tuvieron la tentación de dar una exclusiva?

-No, no. Nunca lo hemos hecho y ni se nos pasó por la cabeza.

-Ustedes siempre han declarado que preferían esperar un poco para tener hijos.

-Sin embargo, durante los dos años que llevamos de relación y el año y medio que llevamos casados, la prensa nos ha inventado un montón de embarazos... No han sido muy prudentes que digamos.

-De golpe cambiaron de idea y fueron a por el bebé.

-Pues, sí, de repente fue como... Nosotros somos muy niñeros. Y, aunque creíamos que aún no era el momento, la idea de ser padres siempre nos ha encantado. Un día nos lo tomamos más en serio, lo hablamos y lo decidimos.

-No esperaban que ocurriera tan pronto.

-¿Exacto! Así ha sido. Fue decidirlo... ¿Y a la primera! Me alegro de no haber tenido que esperar.

-¿Le asusta perder esa serie que tenía prevista para marzo y abril?

-No, porque según me han dicho siguen contando conmigo. Así que aplaudo a la cadena y a la productora, porque es una forma de admitir que una mujer embarazada no es una mujer impedida.

-¿No teme que el papá, con tanta gira, se pierda el crecimiento del bebé, y viceversa?

-No, porque lo mismo me dijeron a mí antes de casarme con David: que apenas le iba a ver. Y, sin embargo, he comprobado que no era para tanto. Nos vemos más que muchos matrimonios convencionales. Y el tiempo que estamos juntos lo aprovechamos al cien por cien.

-A la vista está. ¿Busta ya ha empezado a cantarle a la barriguita?

-Sin parar.

-Usted no tiene antojos... Pero, ¿y Bustamante?

-No le diría que no va a tener más que yo, porque cada vez que digo que me apetece algo él replica: «Y a mí, y a mí».