DERROTADO. El filial amarillo hizo un flojo partido. / R. R.
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El Puerto Real impuso su mayor pegada ante un Cádiz B que mostró poco

No se pudo contemplar un buen partido, sino todo lo contrario, entre el Puerto Real y el Cádiz B. Ambos ofrecieron una mala lección de fútbol, que terminó anotándose el cuadro casero por tener más ganas.

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El choque comenzó con el lógico tanteo de los dos equipos hasta el primer cuarto de hora, donde una jugada iniciada por Rafa Caro por la banda izquierda terminó en el fondo de las mallas amarillas, tras aprovechar Alexis un segundo rechace suelto.

Fue el Puerto Real el que sin apenas hacer gran cosa hilvanó algunos balones de cara al portal cadista. Antes del segundo tanto local, Alexis probaría fortuna, pero mandaría el cuero por encima de la meta de Terrén. Luego Juanito en un despeje defensivo estaría a punto de meter el balón en su propia puerta.

En el 68, llegó el segundo gol local. Pizarraya enganchó una volea desde fuera del área que tras pegar en el poste izquierdo rebotó en la espalda del meta Terrén y terminó en el fondo de la portería cadista. A partir de aquí, sí se abrió el juego.

Cuando parecía más cerca el tercero que el tanto visitante, en un córner llegó el espléndido cabezazo de Germán. Inapelable para Roberto que acortaría distancias pero insuficiente para lograr las tablas. Y aún pudo remachar el Puerto Real con un tiro al larguero de Alexis y una segunda intervención de Terrén antes del final.