Un testamento a la afición

orales deja la presidencia del Xerez con el equipo hundido en la tabla y pasando una de las peores situaciones deportivas de las últimas temporadas. En su despedida, el nazareno quiso dejar claro en más de una ocasión que «le pido perdón a la afición». Para el máximo accionista del Xerez, «puedo perder todo el dinero del mundo, porque tarde o temprano se puede recuperar, pero cuando tu afición te pide que te vayas, lo hago». Según Morales, «lo hacen con toda la razón del mundo, porque para mí son los números uno, los mismos que hacen unos años gritaban presidente, presidente, y ahora quieren que me vaya». Tenía claro el ya ex presidente que la afición es la que manda en el fútbol: «Ellos son los sabios y a ellos los respeto, por lo que admito sus palabras y os juro por Dios que al Xerez lo tengo ya dentro de mi corazón». Era el mensaje de despedida del nazareno, ya que «no puedo hablar más».