El jefe de la Policía Local es detenido por una supuesta venta de coches robados

El jefe de la Policía Local de Conil permaneció anoche en los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil en Cádiz, después de que agentes de la Policía Judicial lo detuvieran por la mañana como supuesto autor de diversos delitos como la estafa, la falsedad documental, el hurto de uso de vehículo motor, la omisión del deber de perseguir delitos e incluso se le relaciona con una conducta delictiva contra la ordenación del territorio.

Francisco Luis González Fernández, de 44 años, fue arrestado cuando estaba en un bar próximo al Ayuntamiento de Conil, ya que en la actualidad se encuentra de baja por una lesión de menisco. La detención ha estado precedida por una larga investigación del Instituto Armado, que trata de probar que este responsable policial se lucraba a través de la venta de vehículos robados, los cuales habían sido recuperados pero nunca devueltos a sus legítimos dueños.

El contenido de las pesquisas, que está sujeto al secreto de sumario dictado por el juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 3 de Chiclana, apunta a que este policía falseó supuestamente documentos para engañar a las compañías aseguradoras y a los propietarios, haciéndoles creer que los vehículos habían terminado en un desguace o que habían desaparecido por completo.

Pero en la escueta información oficial que fue divulgada ayer se menciona que la Guardia Civil también le imputa a Francisco Luis González un delito contra la ordenación del territorio.

Este periódico trató de confirmar si el ahora detenido construyó presuntamente una vivienda en terreno no urbanizable con el dinero obtenido mediante la venta ilícita de coches. Pero el Instituto Armado rehusó entrar en detalles hasta que no se completen todas las actuaciones. Y es que está previsto que los agentes realicen algún arresto más relacionado con el mismo caso.

Además de las supuestas transacciones con vehículos sustraídos, en las investigaciones se hace mención a cómo el jefe de la Policía Local llegó a utilizar algunos de esos coches que constaban como robados.

El alcalde de la localidad conileña, Antonio Roldán, no podía disimular ayer el asombro que le había causado el arresto. Fue el propio subdelegado del Gobierno quien le dio la noticia para que no se enterara «por la prensa», y aunque reconoce que ya habían tenido problemas con este mando policial -el año pasado un joven le denunció por agresión y abuso de autoridad-, no se imaginaban que la Guardia Civil «iba tras sus pasos».

Apartado del servicio

Como primera medida, el alcalde se reunirá esta mañana con el Equipo de Gobierno para adoptar las primeras decisiones. «Tendremos que apartarlo del servicio mientras se aclare la investigación policial», señalaba ayer Roldán, quien puntualizaba que Francisco González es el jefe accidental de la Policía Local al no cubrirse todavía la vacante que dejó su predecesor, Nicolás Maldonado. A partir de ahora, será el oficial Manuel Robles quien asuma esta responsabilidad, también de manera interina, mientras no se resuelva el procedimiento judicial ni se conceda la plaza por concurso oposición.

Nicolás Maldonado fue suspendido de empleo y sueldo en septiembre de 2004 por agredir a un cabo y cometer 14 faltas en actos de servicio. Anteriormente, este mismo agente fue igualmente apartado por hechos similares de la jefatura de Motril (Granada). Para Antonio Roldán, esta sucesión de incidentes es fruto de «la mala suerte». «La convocatoria del año pasado para cubrir esta vacante quedó desierta porque las cinco personas que se presentaron no reunían los requisitos. Ni el propio jefe accidental accedió a la oposición por no cumplir los criterios de selección».

Está previsto que el detenido pase hoy por la mañana a disposición judicial.

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