Prototipo de ordenador portátil de "100 dólares" que será utilizado en centros escolares de las zonas rurales de países en vías de desarrollo. /ARCHIVO
TRAS SIETE MESES DE COLABORACIÓN

Intel se retira del proyecto de portátiles a 100 dólares

La compañía de microprocesadores se aparta del plan "Un portátil para cada niño" que impulsa el profesor Nicholas Negroponte

WASHINGTON Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El fabricante mundial de microprocesadores Intel se ha retirado del proyecto "Un portátil para cada niño", impulsado por Nicholas Negroponte para facilitar a los países en vía de desarrollo el acceso a las tecnologías. La compañía considera que ha llegado a un "punto muerto sobre la filosofía" del programa que iba a facilitar portátiles a 100 dólares.

Tras cerca de siete meses de colaboración, la multinacional ha decidido abandonar el proyecto con el fundador del programa "One Laptop Per Child (OLPC), el profesor del Instituto Tecnológico de Massachussettss (MIT), Nicholas Negroponte.

El New York Times ha publicado hoy que la retirada de Intel como socio destacado del proyecto supone un duro revés para este programa humanitario, que tiene como objetivo proporcionar a los países en vía de desarrollo ordenadores portátiles por 100 dólares para jóvenes estudiantes como forma de fomentar sus capacidades educativas.

La decisión de Intel, que se unió al proyecto en julio de 2007, no solamente supone abandonar la colaboración técnica con OLPC, sino que también cede su puesto en el consejo de la organización sin ánimo de lucro.

Siete meses de disputas

Detrás de esta salida están las diferencias insalvables entre Negroponte y el presidente de Intel, Craig R. Barret, quienes han intercambiado duras acusaciones verbales en los medios de comunicación. Intel comparte con OLPC el objetivo de facilitar a países en vía de desarrollo el acceso a las nuevas tecnologías. De hecho, la compañía viene desarrollando un proyecto similar, denominado Classmate PC, que proporciona "capacidades a los jóvenes" en regiones pobres del mundo.

Esta ha sido una de las claves de la disputa. De hecho, Negroponte había pedido a Intel que abandonara su propio programa, al menos mientras durase su colaboración. Las diferencias llegaron a tal punto que el impulso del proyecto acusó a la compañía de microprocesadores de prácticas empresariales "vergonzosas" y afirmó que dañaba enormemente la misión de OLPC.

Según Negroponte, la multinacional habría vendido su Classmate PC por debajo de su coste de producción para eliminar el proyecto OLPC. La respuesta de Barrett no se hizo esperar: calificó al OLPC de forma despectiva como un "juguete".

Para Negroponte, la reacción de Intel se debe al hecho de que los ordenadores de OLPC, denominados XO, utilizan chips producidos por su principal competidor Advanced Micro Devices (AMD), algo que la compañía informática niega.