EN GRANADA. Herrera, en la Comandancia de la Guardia Civil. / EFE
ANDALUCÍA

La Interpol detiene al jamonero de Trevélez acusado de estafar 25 millones de euros

Antonio Herrera, conocido como el jamonero de Trevélez y el rey del jamón, que llevaba huido de la Justicia desde al año 2004 por haber estafado presuntamente más de 25 millones de euros a cientos de vecinos de La Alpujarra, declarará hoy viernes ante el juez de la localidad de Órgiva, que lleva el caso.

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Antonio Herrera fue detenido el miércoles por la Interpol en la Republicana Dominicana y fue puesto a disposición de las autoridades de ese país, que han ordenado su expulsión y entrega a España. A primeras horas de la tarde llegó al aeropuerto de Barajas y desde allí viajó hasta La Alpujarra, donde mañana se presentará ante el juez.

El jamonero de Trevélez que desapareció del mapa en octubre de 2004, dejando tras de sí una deuda de 25 millones de euros y cientos de acreedores en la estacada, era buscado por la Interpol desde hacía meses.

El titular del juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Órgiva no había dado el caso por olvidado y había dictado una orden de búsqueda y captura nacional e internacional. Y es que, más allá de las actuaciones de tipo mercantil realizadas hasta el momento, este juez investigaba la supuesta responsabilidad penal de Herrera en cuatro delitos diferentes relacionados con el pufo. Y por ello lo buscaba.

Primeras denuncias

Las primeras denuncias interpuestas tras la huida del jamonero por los acreedores y vecinos, que había depositado sus ahorros con la promesa de pingües beneficios, fueron archivadas. No obstante, el citado juez decidió reabrir el caso por la vía penal el mes de mayo, al considerar que podrían existir indicios de hasta cuatro delitos diferentes en el conocido como «caso del jamonero». Estos son: alzamiento de bienes, estafa, contra la hacienda pública y otro de apropiación indebida.

Antonio Herrera, que se ganó el apodo de El rey del jamón, forjó con el paso de los años un imperio con un particular 'modus operandi'. Su negocio creció mediante préstamos que recibía de vecinos, a los que posteriormente reembolsaba las cantidades con un altísimo interés, que oscilaba entre el 16% y el 20%.

Sin embargo, todo empezó a torcerse cuando el negocio flojeó y el jamonero intentó vender el negocio a una empresa alemana. Al conocerse esa noticia, los acreedores se lanzaron en masa a solicitar la devolución de su dinero, por lo que todo se fue a pique. Antonio Herrera se fue a un país del Este con una presunta amante y con más de 6 millones de euros.

Incautación

Poco tiempo después fue localizado en Santo Domingo. Mientras tanto, la Justicia se incautó de todos los bienes propiedad del jamonero para hacer frente a la multitud de reclamaciones por impago que existían contra él. El caso produjo un gran revuelo en toda la comarca, ya que muchos vecinos habían puesto todos sus ahorros en el negocio del jamonero.

En una entrevista que fue concedida al periódico Ideal en la Republicana Dominicana, dijo que había huido porque estaba amenazado por una mafia rusa a la que debía mucho dinero.

En el transcurso de aquella entrevista llegó a afirmar que no descartaba entregarse en los próximos meses a la justicia española, pidió perdón a los estafados y aseguró que quería volver con su familia.

La noticia de la detención del presunto estafador ha causado satisfacción en los círculos de estafados, aunque parecen estar convencidos de que será muy difícil que puedan recuperar su dinero.