El cantante promociona por cielo, tierra, mar y aire su último disco. / LA VOZ
Gente

David Bustamante tiene «muchas ganas de montar la marimorena» sobre el escenario

Mientras se hacen las fotos del reportaje en un patio andaluz, un grupo de adolescentes concluye su visita colegial al periódico en la vecina biblioteca. En cuanto ven a David Bustamante a través de la cristalera que separa ambos lugares, empiezan los gritos, las carreras; asoman los móviles para retratarle o para contar la noticia. El revuelo es formidable. «Esto es algo habitual -dice sin inmutarse el cantante-; y si voy a un centro comercial, mayor aún» ¿Y no agobia? «No, porque es muestra del cariño de la gente, de su ilusión. A mí, además, me gusta la gente. Y lo mejor del mundo es que te quieran. Puede llegar a ser molesto cuando estás en un restaurante y alguien con una copita de más se pone pesado y te tira una servilleta encima del jamón para que le firmes un autógrafo... como me ha llegado a pasar».

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

David Bustamante acaba de publicar su quinto disco, Al filo de la irrealidad (Vale Music), producido por Kike Santander -«un gigante en todos los sentidos»-, con el que lleva dos semanas en el número uno. «Musical y vocalmente he crecido mucho -asegura-, y eso se nota en el disco. Yo tenía 19 años cuando me presenté a OT, y entonces me excedía en querer demostrar. Ahora, con 25 años, las cosas se ven de otra manera. Ese aprendizaje se nota en los matices, en los graves, en los agudos, que tienen más cuerpo. Hay dos canciones que tienen letra mía... Tengo el compromiso de seguir creciendo, de dar más cada día. Yo confío en mi trabajo, en mi esfuerzo. Y llegar al número uno después de seis años es prueba de que el trabajo es serio y está bien hecho». Asegura el cantante que sigue con los pies en el suelo -«no es difícil tenerlos, sólo hay que cerrar los oídos a los cantos de sirena»-, que es el tiempo el que pone a cada uno en su sitio, y que espera con ilusión el momento de encontrarse de nuevo con el público. En mayo comenzará una gira de cinco meses con setenta conciertos. «Tengo ganas de subirme al escenario, de cantar y de montar la marimorena». / J. B.