Sudáfrica tendrá que esmerarse para no perder el tren del Mundial

Sudáfrica hizo el domingo el sa-que inicial del Mundial 2010 al albergar el sorteo de la fase de grupos, pero a partir de ahora deberá esmerarse, sobre todo en la construcción de los estadios, si no quiere sorpresas de última hora y perder la organización del evento.

El presidente de la FIFA, Sepp Blatter, insistió durante su estancia en Durban en que Sudáfrica será la sede del Mundial, pese a los retrasos en la construcción y mejora de los estadios, el alto índice de criminalidad y alguna inquietud en el tema de la mejora de la red de transportes.

«Estamos confiados en que Su-dáfrica va adelante hacia la realización de un evento maravilloso», afirmó Blatter. «Es normal que haya problemas, pero todas las dificultades tienen remedio, y se solucionan con determinación».

El tema de la seguridad ha vuelto a levantar dudas, después de que un turista austriaco fuera asesinado en Durban. «En una ciudad de 3,5 millones de personas, son posibles algunos crímenes como en cualquier país», añadió Blatter. El comité organizador y el gobierno sudafricano han prometido la presencia de 30.000 policías durante el Mundial 2010 para cuidar de la seguridad.

Pero la construcción de los estadios es el tema que genera más inquietud. El estadio de Durban sufrió una huelga a principios de noviembre, mientras que los que se están construyendo en Ciudad del Cabo y Port Elizabeth arrastran grandes retrasos. «Los estadios son el corazón del Mundial. Si no los tienes los no tienes el Mundial. Es el centro de todo», reconoció Danny Jordaan, director ejecutivo del comité organizador.

Mientras Blatter se muestra conciliador con Sudáfrica, el secretario general, Jerome Valcke, lanzó algunos mensajes a los organizadores para que se den prisa. «Es necesario que estén para una fecha determinada. Siete meses antes del inicio del Mundial debemos tener un plano del recinto, para imprimir y poner a la venta de las entradas», dijo Valcke.

Huelgas

Una de las grandes preocupaciones de los organizadores será que no haya más huelgas como la que paralizó el estadio de Durban durante casi dos semanas, aunque se ha alcanzado un acuerdo y las partes se han comprometido a que no haya más paros.

Valcke anunció que espera un informe en el primer semestre de 2008 sobre los estadios para tomar decisiones, que irían en principio sólo destinadas a cambiar de sedes dentro de Sudáfrica.

Mientras tanto, muchos medios de comunicación han barajado alternativas a Sudáfrica si falla, entre las que estarían España, México y Australia.