OPTIMISMO. Los racinguistas mantienen la moral alta. / A. VÁZQUEZ
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El Portuense recibe a un rival directo por la permanencia

Los rojiblancos se miden esta tarde al Talavera en el José del Cuvillo con la obligación de sumar los tres puntos

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El pinchazo de la pasada semana en Jaén supuso un jarro de agua fría en las aspiraciones del Racing Portuense para salir definitivamente de la zona crítica de la clasificación. Hoy dispondrá en el José del Cuvillo de la oportunidad de enmendar este error ante otro de los equipos que ven de cerca el pozo de la Tercera División, el Talavera.

Para este choque Carlos Orúe contará con dos importantes bajas. Masegosa sigue aquejado de los mismos problemas de espalda que ya le hicieran perderse el partido en Jaén mientras que Velázquez deberá cumplir un partido de sanción por acumulación de tarjetas. Dos ausencias a las que en el último momento también podrían sumarse Merino y Sanlúcar por problemas en un tobillo y en los isquiotibiales, respectivamente.

A pesar de los incovenientes, el técnico rojiblanco mantiene un optimismo que espera transmitir a su plantilla: «Tenemos ganas de revancha para intentar olvidar cuanto antes el mal partido de Jaén y encontrar el camino bueno». Con respecto al rival de hoy asegura que «es un equipo rocoso, de mucha talla que basa mucho su juego en balones aéreos», destacando además el juego de su estrella Raúl Caballero, que «desde la media punta es el que marca un poco la diferencia en el equipo».

Por su parte el Talavera, decimosegundo en la tabla con 16 puntos, llega al Cuvillo con la moral reforzada tras su victoria el pasado domingo ante el Marbella de Oli (2-0). El técnico toledano Pedro Morilla repetirá prácticamente equipo y vendrá con las premisas de mantener la posesión de la pelota y la presión sobre la salida en defensa de los racinguistas.