VENTAS. Los concesionarios aún no han notado un descenso en sus resultados por el final del Plan Prever.
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Renovarse o morir

Los concesionarios de la provincia piden que se mantenga el Plan Prever y revindican su compatibilidad con la nueva tasa ecológica

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El parque automovilístico español es uno de los más viejos de Europa, y el de Cádiz uno de los más antiguos de España». Así resume José Luis Torres, responsable del concesionario Honda en Cádiz, la situación que se vive en el mercado de los concesionarios de automóviles de la provincia ante la finalización del Plan Prever. Entre la resignación y la expectación se mueven los vendedores de coches, que reconocen que la medida «aún no se ha notado en las ventas», pero que esperan «una lógica caída» de las mismas en enero cuando los conductores tomen conciencia de la medida.

«Aunque no fuera una ayuda enorme, se trata de unos vehículos, los que tienen más de 10 años, que no se puede recomercializar. Sin embargo, un propietario siempre es reacio a desprenderse de su vehículo y piensa que si todavía funciona, que al menos le den algo por él», razona Torres, que explica que la bonificación, aunque pequeña -está fijada en un máximo de 480,81 euros- servía «de incentivo» a los usuarios para renovar su coche.

«En los concesionarios estamos en contra de que acabe el Plan porque Cádiz continúa teniendo uno de los parque más envejecidos de España. Y cada coches con más de 10 años contamina más que 10 coches actuales», argumenta este veterano vendedor. «Creemos que una nueva fórmula en el impuesto de matriculación basado en criterios ecológicos no es incompatible con un Plan Prever, mientras se mantenga el gran número de coches viejos que tenemos», detalla. «Tiene mucho más efecto sobre el medio ambiente retirar un sólo coche antiguo que bonificar diez nuevos», insiste Torres, que opina que es necesario una fórmula que penalice a los automóviles viejos «porque son los que siguen contaminando».

Respecto a los efectos sobre las ventas, José Luis Torres reconoce que a nivel de marcas «todavía no se ha notado una disminución, creemos que diciembre será el mes en el que pueden subir las ventas con los últimos coches que se acojan y en enero, por lógica, vendrá la caída». «Los políticos deberían coordinar nuevas políticas, mantener el Plan e incluso mejorarlo. No es un Plan para vender más, sino para quitar los coches más inseguros y más contaminantes», remata.