«La previsión científica se ha ido cumpliendo»

José Luis Rubio Delgado es premio Rey Jaime I de Protección al Medio Ambiente e investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.

El director del Centro de Investigaciones sobre Desertificación acudió ayer al Museo de las Ciencias Príncipe Felipe en calidad de representante del Alto Consejo Consultivo de la Presidencia de la Generalitat. Habla pausadamente y, como buen investigador, opina con cautela, aunque sus palabras destilen preocupación ante el futuro.

-¿Es exacta la información que se está ofreciendo sobre el cambio climático?

-Las previsiones científicas en este sentido se han ido cumpliendo. A nivel científico, existe un grado de incertidumbre evidente en las predicciones sobre las consecuencias del fenómeno, pero sí, el planeta emite señales preocupantes, como es la presencia de componentes químicos en la atmósfera muy contaminantes, que permiten establecer relaciones de causa-efecto graves.

-¿El ciudadano puede notar hoy esos efectos?

-Funcionamos con datos estadísticos, que revelan tendencias comprobables, como son las reducción de las precipitaciones, el aumento de fenómenos meteorológicos extremos y de enfermedades tropicales, así como la aceleración de la maduración de los frutos de la tierra. Eso lo puede percibir cualquiera, y lo preocupante es que las consecuencias del cambio climático, como es el caso del deshielo, retroalimentan ese calentamiento, de modo que el mundo tiene un problema, porque no es capaz de solucionar la situación presente ni de controlar los problemas futuros.

-¿Y qué se puede hacer?

-A nivel individual, y somos muchos millones de personas en el mundo, se debe reducir el consumo de energía, de agua y la generación de residuos. No estamos hablando de vivir espartanamente, sino eliminar lo superfluo y tener mesura, por ejemplo, a la hora de utilizar el aire acondicionado o comprar bombillas y electrodomésticos de bajo consumo energético.

-¿Qué opina de la reunión que se celebra en Valencia?

-Lo que hace el IPCC es una labor meritoria científica y socialmente, aunque en este asunto de la emisión de CO2 las cuentas a mí no me cuadran. El suelo, su labor de regulación del clima, no aparece por ningún lado. Se analiza el efecto de los gases sobre el mar y la atmósfera, pero las consecuencias en el suelo han quedado abandonadas.