Jerez

Los vecinos de San Telmo vuelven a exigir más seguridad en sus calles

Los vecinos de San Telmo Viejo no saben ya qué hacer para que las administraciones correspondientes aumenten la seguridad en sus calles. De hecho, llevan mucho tiempo solicitando que las patrullas de la Policía Nacional «se dejen ver por la zona de forma constante», ya que «la situación empeora por días».

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Y es que a pesar de los controles que se llevaron a cabo la semana pasada, «la situación en estos instantes en las mismas. La Policía está aquí cuatro días y se va. Se vuelven a olvidar de que los vecinos de San Telmo necesitamos que estén en este barrio porque no estamos en él tranquilos», explica Rocío Trujillo, presidenta de la asociación de vecinos de la zona.

Además de los puntos de venta de droga que existen en el barrio y que «están claramente detectados», en los últimos meses han aumentado las agresiones a los vecinos que deciden plantar cara a estos personajes». Una realidad que está comenzando a minar, una vez más, la paciencia de muchas personas. Hay que recordar que la última vez que los vecinos de San Telmo decidieron decir «basta» se echaron a las calles y ellos mismos expulsaron a los vendedores de drogas de los puntos habituales en los que se situaban a diario.

«Esta vez, muchos de estos sujetos han decidido colocarse para trapichear en una pequeña calle que hay detrás del IES San Telmo. Esa zona se ha convertido en la boca del lobo y a pesar de ser un pasaje por el que tenemos que pasar con frecuencia los vecinos, son muchos los que temen coger por allí», asegura Rocío Trujillo.

Asimismo, es importante señalar que hace varios meses, los vecinos a través de su asociación solicitaron al Consistorio la instalación en esta vía de «varias farolas antivandálicas con el objetivo de que no pudieran romper las que están ubicadas en la calle. Hasta la fecha no se han puesto, lo que ha originado que hayan tomado este pasaje como suyo», subraya la representante vecinal.