El instituto Castillo de Tempul disfruta ya de luz sin generador

Parecía que el día no iba a llegar nunca pero fue el pasado viernes 26 de octubre cuando, literalmente, se hizo la luz en el IES Castillo de Tempul, en San José del Valle. Después de un año de escritos, manifestaciones, protestas y peticiones, los alumnos y profesores de este instituto se pueden olvidar por fin de las molestias causadas por el generador de luz que tenían instalado en el patio del centro para poder dar las clases.

«Todavía nos parece mentira. La lucha ha merecido la pena», aseguró ayer orgullosa la presidenta de la asociación de madres y padres del instituto, Isabel Domínguez. «Ya nos han quitado el ruido, el humo, todo», continuó en referencia al molesto generador de luz que durante todo el día traqueteaba junto a las aulas y que funcionaba con gasoil. «Por fin hemos vuelto a la normalidad», resumió.

Con estas palabras concluía una reivindicación que ha mantenido unidos ante la adversidad a los padres de los alumnos. La última movilización que protagonizaron fue el pasado 1 de octubre, día en que se cumplía un nuevo plazo otorgado por la comunidad educativa del centro a la Delegación de Educación para poner fin a esta situación. Aquel mismo día y apenas dos horas después de que los padres impidieran el acceso de los alumnos a clase, los operarios de Endesa comenzaron a trabajar en el edificio aunque ha hecho falta casi un mes para solventar las formalidades burocráticas que, en principio, iban a solucionarse en tres días.

Una vez solventada la necesidad más urgente, el IES Castillo de Tempul espera ahora el comienzo de las obras de la prometida ampliación con cuatro aulas más para disponer de espacio, por ejemplo, para una biblioteca o para que los alumnos de Primero de Secundaria no tengan que dar sus clases en el viejo CEIP Ernesto Olivares.

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