Nunca es tarde

Con los libros bajo el brazo y esbozando una amplia sonrisa. Así salía ayer de la Facultad de Ciencias del Trabajo, sede donde se presentó el Aula Universitaria Mayores 2007/08, Manuel del Río, un jubilado de 65 años de edad cuyos estudios le han dado la oportunidad de «vivir una segunda juventud». «Yo no soy nuevo en esto, el lunes empiezo el cuarto curso», comienza diciendo con la ilusión de un niño cuando pasa de nivel. «Aquí me he encontrado con antiguos amigos con los cuáles ya había perdido el contacto», dice.

Manuel es un apasionado de la Literatura, el Arte, el Dibujo y la Música. «En general me gustan todos los módulos que llevamos, el material es muy diverso y variado, pues cada diez o quince días lo cambian, con lo cual no nos aburrimos. Es un experiencia muy positiva, se la recomiendo a todo el mundo», detalla.

Francisca Morilla Pérez, presidenta de la Asociación Universitaria de Mayores Gaudeamus Igitur, también destaca la importancia terapéutica que el Aula Universitaria Mayores tiene en la vida de estos alumnos. «Es la forma de sacar a estas personas mayores de sus casas y de que hagan una vida menos sedentaria y más social», explica.

Para matricularse en el Aula de Mayores Universitaria sólo se deben de cumplir dos requisitos: «ser mayor de 55 años de edad y estar jubilado», aclara Francisca.

Las clases son impartidas por profesores de la UCA de lunes a jueves, de cinco a siete de la tarde, en el aulario de La Bomba y en ellas tampoco faltan la clases de gimnasia, Tai-Chi y natación. «Los viernes están dedicados a las actividades culturales que son organizadas por la asociación», comenta Rafael Higueras Rodicio, el tesorero de la entidad, quien como Francisca, es ex alumno del Aula Universitaria Mayores. «Nosotros esta experiencia la vivimos hace cuatro años y ahora nos dedicamos a coordinar las visitas a los museos, las iglesias y los barrios de la ciudad».

Desde la asociación Universitaria de Mayores Gaudeamus Igitur también se «hacen excursiones a Almería, Granada y todos los pueblos de la provincia».

Por otro lado, a los alumnos de tercer curso del Aula Universitaria Mayores se les impone una beca con el objeto de que el cuarto y quinto año realicen un trabajo de investigación», detalla Rafael.

Reseña histórica

El Aula Universitaria Mayores fue fundada en el año 1996 por la vicerrectora Paloma Braza y es la segunda más antigua de Andalucía por detrás de Granada. «Aquel primer año se matricularon 35 alumnos», detalla Arturo Prada, el director del Aula Universitaria Mayores. En este curso 2007/08 se han matriculado 538 personas en Cádiz, 516 en Jerez, y 100 en Algeciras. Asimismo, existe un aula itinerante en los pueblos de la provincia.

Mil historias personales

Los números revelan que el Aula Universitaria Mayores cada vez es más solicitada por los jubilados gaditanos. «Se trata de un proyecto importante. Lo ves en la vertiente humana del aula. Ellos vienen con mucha ilusión porque muchos de ellos no tuvieron la oportunidad de estudiar. Lo que más nos llama la atención a los profesores es la espontaneidad y la gran participación de estas personas. Son alumnos que, por su experiencia, tienen mucho que aportar. Historias de soledad, de viudedad, de superación ante alguna enfermedad, y aún así sacan fuerzas para venir todos los días a clase. Detrás de todo esto hay 1.100 historias personales», confiesa Arturo. Y agrega: «Es un encanto darles clase, es otra dimensión».

El Aula Universitaria Mayores consta de cinco cursos académicos consecutivos anuales en donde «se tocan todas las ramas del conocimiento, como Derecho, Historia del Arte, Informática, Geografía, Dibujo, Literatura, Historia Local, etc», acota Arturo.

jmvillasante@lavozdigital.es