Nutrición
Por qué no sirven de nada los probióticos si no tomas prebióticos
El cuidado de la microbiota intestinal depende del consumo de alimentos ricos en probióticos y prebióticos
Para mantener nuestra microbiota en forma, ese 'segundo cerebro' del que tanto se habla, hay que mantener una dieta rica tanto en probióticos como en prebióticos, además de tener como rutina un estilo de vida saludable.
Lo más importante es entender tanto qué son los probióticos como los prebióticos, y qué función cumplen en nuestro cuerpo. Paul Hammer, CEO y fundador de BIOMES, empresa especializada en el cuidado de la microbiota, explica que los probióticos son microorganismos vivos que pueden tomarse como cápsulas o mediante alimentos probióticos como el yogur, el queso de leche cruda o las aceitunas encurtidas. «Estos microorganismos, que en su mayoría son bacterias, pueden entrar en el intestino grueso y asentarse allí», comenta el profesional. De esta manera, los microorganismos ayudan al cuidado de la microbiota. Los ámbitos de aplicación de los probióticos son diversos: desde el tratamiento de las enfermedades inflamatorias crónicas del intestino y el estreñimiento hasta la prevención de alergias o de neurodermatitis.
Por otro lado, los prebióticos son fuentes de energía para los microorganismos beneficiosos . «En su mayoría son hidratos de carbono no digeribles. Al no ser absorbidos por el huésped, llegan al intestino grueso donde sirven de fuente de energía para la microbiota intestinal», explica Hammer. Por ello, es importante tomar ambos tipos de alimentos a la vez. «La ingesta simultánea puede crear las condiciones ideales de crecimiento para los microbios beneficiosos y así contribuir a una colonización más estable», apunta el profesional.
Cómo funcionan los probióticos
Aunque es muy bueno tomarlos juntos, también es importante saber diferenciar probióticos de prebióticos , en pro de aprovechar todos sus beneficios. María Lourdes Rubiolo, dietista-nutricionista dedicada a la salud gastrointestinal, y colaboradora de 'newyou. chocolate' deja tres claves para esenciales para entender cómo funcionan ambos:
1. Lo más importante es saber que los probióticos son microorganismos vivos (bacterias) que tienen un efecto positivo en nuestra cuerpo; mientras que los prebióticos son alimentos con alto contenido de fibra alimentaria, que serán 'la comida favorita' para esas bacterias.
2. Mientras que los prebióticos se toman a través de alimentos como frutas y verduras , los probióticos naturales se hallan en productos fermentados, como por ejemplo el yogur.
3. Los probióticos se han utilizado en gran número de patologías , principalmente en problemas gastrointestinales, en procesos inflamatorios crónicos, como la enfermedad inflamatoria intestinal, o en trastornos funcionales, como el síndrome del intestino irritable.
«La base de una microbiota sana es el estilo de vida», asegura Paul Hammer. Para ello, el profesional no solo recomienda tener una dieta equilibrada con una alta proporción de alimentos de origen vegetal , sino también hacer ejercicio regularmente y evitar el estrés excesivo. También puede tener efectos positivos para nuestro microbioma intestinal. «Por otra parte, es recomendable evitar la ingesta no esencial de antibióticos. La mayoría de los antibióticos eliminan tanto a los patógenos como a las bacterias beneficiosas del intestino, un hecho que puede conducir a un desequilibrio entre los microbios beneficiosos y los que son potencialmente dañinos», concluye Hammer.
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