Estar preparados

«Toda mi vida fue una preparación para llegar a ser premier del Reino Unido», afirmó Winston Churchill en su discurso de investidura el 11 de mayo de 1940.

Tenía 66 años y una biografía repleta de méritos al servicio de la sociedad británica. Si prospera el tándem Pedro y Pablo, España está a punto de experimentar un gobierno cuyos principales miembros, desde el presidente y el vicepresidente, carecerán de experiencia, tanto política como profesional.

La política es algo muy serio, ya que a través de ella se concreta nuestro tiempo, y sus circunstancias. De la política dependen la educación de nuestros hijos, la libertad, la viabilidad de una sanidad pública tan puntera como la actual, la seguridad, las pensiones, el clima para generar riqueza y progreso, nuestro bienestar y, en este momento, incluso la unidad de España.

Me temo que, por primera vez en generaciones, casi todo eso va a ponerse en riesgo si la izquierda y la extrema izquierda logran alcanzar ese poder que tanto ansían. Reconozcámoslo: ni Pedro Sánchez ni Pablo Iglesias son Churchill. Ni tienen 66 años. Ni llevan toda su vida preparándose para gobernar España.