Imagen de la presentación del proyecto de centro cultural sefardí en el Salón de los Espejos de Málaga.
Imagen de la presentación del proyecto de centro cultural sefardí en el Salón de los Espejos de Málaga.
Religión

Dos millones de euros privados reactivan la sinagoga de Málaga

Incluirá un restaurante en el ático y una sala de exposiciones desde la que se pretende acabar con tópicos alrededor de esta comunidad

Málaga Actualizado: Guardar
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La comunidad judía de Málaga ha conseguido finalmente los dos millones de euros de financiación privada necesarios para construir el centro cultural sefardí -con sinagoga incluida- que no podía hacer realidad desde al menos hace dos lustros en pleno centro de la ciudad. Ahora este edificio ocupará uno de los espacios vacíos más codiciados de la denominada manzana de oro de la capital costasoleña para estar listo en dos años. El Ayuntamiento lo cede para este uso por 75 años.

 Hay que remontarse a 2008 para saber que la rehabilitación de la actual Judería incluiría la construcción de una sinagoga dentro de una ambiciosa instalación cultural. El edificio de ahora prevé elevarse sobre una planta baja más dos y albergará un ático con restaurante.

En las plantas inferiores irían el vestíbulo, la sala de culto, biblioteca, sala de estudio, zona administrativa, archivo, zona de museo, tienda y aseos, entre otras. Para exposiciones, lo que se supone como uno de sus fuertes, destinará 800 metros cuadrados.

El proyecto que ha esperado tanto tiempo sigue siendo un solar tapiado ubicado entre las concurridas calles Alcazabilla y Granada, a escasos metros del Museo Picasso, la Alcazaba y el Teatro Romano y es de alguna manera un homenaje explícito a una herencia cultural poco reivindicada en Málaga y que tiene a figuras como el poeta judío Ibn Gabirol, con estatua en la calle de al lado, como uno de los estandartes en torno al que se ha fraguado este proyecto. De hecho se tratarán de hacer actividades en su honor alrededor de este espacio en 2018, cuando se cumple el milenio de su nacimiento.

 En este lugar, debía rendirse tributo a la vieja y, a tenor de algunos testimonios escritos, importante colonia sefardí medieval, en un marco donde todo ha sido rehabilitado menos el símbolo alrededor del cual se había diseñado el proyecto, el lugar de oración e interpretación de la historia de esta comunidad en la ciudad. Rubén Bentata, el presidente de la comunidad sefardí de Málaga, destacó que «será una de las pocas juderías españolas en las que haya judíos trabajando en el día a día. Ya que pretende ofrecer una visión panorámica de la vida intelectual, social y espiritual de los judíos españoles para disolver tópicos y deshacer suposiciones mediante una visión innovadora».

 La misma, que según el proyecto presentado tendrá una fachada en mármol, ocupará una travesía entre las calles mencionadas y presidirá la plaza que hace 500 años se supone que era espacio poblacional sefardí más o menos homogéneo y en la que ahora mismo luce una fuente en alusión a la obra 'La fuente de la vida' del propio Gabirol y que suma la presencia de un olivo centenario bajo la torre que hace las veces de centro de recepción de turistas.

En su momento la asociación que impulsaba este proyecto empleó una donación de 300.000 euros, que en principio tenía pensado gastar en esta construcción, para la rehabilitación del cementerio judío de Casabermeja mientras ha vivido cambios internos en su corporación y ha estado falta de la liquidez necesaria para levantar esta nueva y ambiciosa sede.

 Ahora toca realizar los correspondientes trabajos arqueológicos en la zona donde no es complicado que puedan encontrarse restos de las sucesivas civilizaciones que hubo anteriores a la conquista cristiana y frenar algo la materialización de este ansiado proyecto. No en vano esta reminiscencia sefardí se une al complejo de culturas superpuestas que serán los restos fenicios hallados bajo el Museo Picasso, a escasos metros, el Teatro Romano o La Alcazaba árabe.

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