Pedro Lavirgen no puede recoger el premio «Voz de Oro» por enfermedad

El tenor cordobés Pedro Lavirgen tuvo buena parte de la culpa de que la IV edición de los Premios Voces del Año, que organiza la Asociación Amigos de la Lírica, se haya celebrado este año en Córdoba, la tiene este tenor nacido en Bujalance hace ya 85 años. Él, y también el hecho de que la directora artística de la gala que rodea a estos galardones, la soprano Juana Castillo, es también hija de esta tierra, además de que la propia ciudad «ha sabido acoger esta acto con el cariño y el respeto que se merece» una con vocatoria joven en años, pero de una importancia fuera de toda duda.

La celebración tuvo lugar a las 20.30 horas sobre las tablas del Gran Teatro, y en ella se entregaron los correspondientes galardones al tenor barcelonés Carlos Cosías como «Voz Masculina del Año», a la soprano madrileña Saioa Hernández como «Voz Femenina del Año», al barítono madrileño Luis Cansino a la «Trayectoria Profesional» y a Pedro Lavirgen a la «Voz de Oro».

De ellos, los tres primeros demostraron en directo, acompañados al piano por el maestro salmantino Diego Rivera, los motivos y méritos para obtener sus premios.

Pero el tenor cordobés, tanto por edad como por enfermedad, estaba eximido de tener que demostrar nada sobre las tablas del Gran Teatro. Entre otras cuestiones porque se encuentra convaleciente y los médicos le han recomendado que no viaje, y mucho menos que experimente emociones fuertes como el homenaje recibido a su persona desde el mundo de la lírica española.

Por ello, su nieta, Marta, fue la que acudió en su lugar para recoger el galardón que le acredita como «patrimonio cultural inmaterial» de todos los españoles, como gusta en calificarle Juana Castillo, y quien también leyó unas palabras escritas por su abuelo para agradecer un honor que tiene bien merecido. No en balde, el cordobés es el primero en ser reconocido con este premio.