UNIVERSIDAD

Investigadores de la Universidad de Córdoba: Nuria Barbarroja, contra las alteraciones que causa la artritis

Nacida en Puertollano, llegó a la UCO como alumna en los 90 y ha regresado con un contrato Ramón y Cajal

La investigadora Nuria Barbarroja VALERIO MERINO

Félix Ruiz Cardador

La relación de Nuria Barbarroja , profesora e investigadora natural de Puertollano, con la Universidad de Córdoba comenzó en 1995, cuando empezó la carrera de Biología. Después realizó su doctorado en Biomedicina , también en la UCO. Tras unos años realizando su etapa postdoctoral en distintos centros, que incluyeron el Hospital Clínico Virgen de la Victoria en Málaga y la Universidad de Cambridge en el Reino Unido, regresó al Imibic , donde ha llevado a cabo su labor de investigación en estrecha relación con la Universidad. Desde comienzos de este año, disfruta de un contrato Ramón y Cajal , muy competitivo a nivel nacional y que concede el Ministerio de Economía y Empresa a i nvestigadores que hayan tenido un carrera científica brillante con el fin de que realicen su propia línea de investigación en el ámbito de la Universidad, permitiendo de este modo la estabilización del investigador como docente. Nuria es desde entonces profesora en el departamento de Medicina e imparte clases en el grado de Medicina y Fisioterapia, así como en el Master en Investigación Biomédica Traslacional . Desarrolla al mismo tiempo una investigación en el campo de las enfermedades autoinmunes e inflamatorias crónicas .

Su grupo de investigación, según explica ella misma, es un grupo de mujeres y hombres multidisciplinar compuesto por especialistas reumatólogos, biólogos o bioquímicos, técnicos de laboratorio y enfermeros. Con ello, «se consigue abordar los aspectos de interés de estas enfermedades combinando una aproximación clínica con la molecular», señala. El grupo está dirigido por el doctor Eduardo Collantes , jefe del Servicio de Reumatología del Hospital Universitario Reina Sofía, y por Chary López Pedrera , doctora en Biología. En el grupo de investigación se llevan a cabo varias líneas; una de ellas está relacionada por ejemplo con las enfermedades autoinmunes sistémicas y la aterotrombosis y otra con la inflamación en artropatías crónicas.

Reconoce que compaginar la investigación con su labor como docente es complicado, «puesto que las dos actividades demandan mucho tiempo»

Hay una tercera línea sin embargo que dirige la propia Nuria Barbarroja y que trata de estudiar los mecanismos que están involucrados en el desarrollo de alteraciones metabólicas en las enfermedades autoinmunes e inflamatorias crónicas como la artritis reumatoide y la artritis psoriásica . «Los pacientes con estas enfermedades poseen un riesgo mayor de padecer enfermedad cardiovascular que la población general», explica la doctora, por eso lo que persigue es «estudiar cuál es la causa y qué moléculas están implicadas», algo que dará lugar si se consigue «al desarrollo de nuevas dianas terapeúticas para el tratamiento efectivo o la prevención de esta comorbilidad asociada a las enfermedades autoinmunes e inflamatorias crónicas». La profesora explica que «nuestra investigación ha sido reconocida por distintos premios de ámbito nacional y esta financiada por fondos europeos y entidades nacionales, como Fondo de Investigación Sanitaria y el Ministerio de Economía y Empresa».

Nuria Barbarroja reconoce que desarrollar al mismo tiempo esta investigación y su labor como docente es complicado, «puesto que las dos actividades demandan mucho tiempo». Ella, según explica, intenta dedicarse a fondo a la investigación en las épocas en las que no hay clase y agradece que «mi equipo me apoya en los momentos en los que no puedo emplear todo el tiempo a la investigación y estoy dedicada a la docencia». Más allá de estos problemas, la investigadora entiende que son dos tareas «muy complementarias y apasionantes, que me generan muchísima satisfacción». «Las asignaturas que imparto están enfocadas a dar a conocer al alumno la actividad de un investigador y prepararlo para que se pueda dedicar a ello una vez terminada la carrera», añade. Su labor docente implica por ello enseñar a los alumnos a investigar, las etapas de la investigación, a ser rigurosos y seguir el método científico. «La existencia de estas asignaturas hoy en día y el hecho de que puedan ser impartidas por investigadores con una destacada carrera científica es un gran avance por parte de la universidad, que contribuye al impulso y fomento de la investigación desde el inicio de la carrera», señala.

En cuanto a los alumnos y alumnas que se matriculan por primera vez en grados de Ciencias de la Salud , la investigadora reconoce que sus conocimientos sobre investigación son «escasos», aunque «algunos de ellos están más interesados y su mayor grado de motivación se percibe en las aulas cuando se imparten las asignaturas más relacionadas con este área ». No obstante, en el grado de Medicina de la UCO se imparten varias asignaturas directamente relacionadas con la investigación, de modo que, cuando el alumno finaliza su carrera, «los conocimientos adquiridos son muy relevantes, habiendo desarrollado las competencias necesarias para iniciar cualquier actividad de investigación».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación