Cinco interpretes que dieron vida a varios personajes en la misma serie

De cuando los actores también son pluriempleados

Los actores, además de dar vida a los personajes de nuestras series favoritas, son un recurso infinito a la hora de hablar de curiosidades. En entradas anteriores, hemos narrado casos de actores que interpretaban al mismo personaje en diferentes series e incluso casos de personajes que cambiaron de intérprete a mitad de temporada, pero aún hay mucho de lo que hablar.

En concreto, en esta entrada abordaremos el caso de los interpretes que dan vida a diferentes personajes en una misma serie, pero iremos más allá de curiosidades como el papel de Lisa Kudrow como Phoebe y Ursula en «Friends», el caso de los dobles de «Como conocí a vuestra madre» o el de actores que interpretan otro rol en un sueño puntual (véase «Matrimonio con hijos»).

Tatiana Maslany, la chica de los clones

Empezare con el caso que me inspiro este artículo. Tatiana Maslany es la protagonista de «Orphan Black», una serie en la que se trata el tema de la clonación humana. Debido a que todo gira en torno a los clones de la protagonista, Maslany ha tenido que interpretar tanto a Sarah Manning, el personaje principal, como a todos sus clones.

Así pues, Maslany da vida a una joven con una vida un poco desecha, a una madre futbolera, a una lesbiana científica, a una loca religiosa y a una dura ejecutiva del sector biológico.

Cada personaje tiene sus propias características y aunque comparten rostro, el trabajo de Maslany y de dirección nos hace dudar de si estamos ante la misma actriz.

Garret Dillahunt y su milagro en el western

A Garret Dillahunt lo conocemos por haber formado parte de innumerables series de televisión como son «Los 4400», «Las crónicas de Sarah Connor» o «Hope», pero sin duda uno de sus trabajos más memorables fue el que realizo en el western «Deadwood». Allí dio vida Jack McCall durante la primera temporada, pero volvió en la tercera para interpretar a Francis Wolcott, un tipo rico que poco tenía que ver con el borracho que buscaba venganza al principio de la serie.

Al igual que los dos personajes, la interpretación de Dillahunt fue completamente diferente y a día de hoy hay gente que no sabe que el mismo actor fue capaz de dar vida a dos personajes tan opuestos, pensando incluso que se trataba de actores diferentes.

Judy Greer, una mujer y media

El caso de Judy Greer, actriz a la que hemos visto en infinidad de trabajos desde que comenzara su carrera en 1997, es un tanto especial. No solo pone voz e interpreta a Cheryl y otros personajes de la fantástica «Archer», sino que interpreto a dos personajes muy diferentes en «Dos Hombres y Medio».

En 2007, la conocimos como Myra, la hermana de Herb y una de las muchas chicas con las que Charlie Harper (Charlie Sheen) se dio el lote en esta serie. Curiosamente, y pese a la cantidad de actrices que hay en Hollywood, en 2011 volvió a la serie como la ex de Walden (Ashton Kutcher), convirtiéndose en un personaje secundario regular.

Jerry Orbach, un actor de Ley y Orden

Antes de sus papeles en «Ley y Orden», muchos recordábamos a Orbach por su participación en «Se ha escrito un crimen», una serie en la que repetía su papel de Harry McGraw en «The Law & Harry McGraw».

Curiosamente, antes de convertirse en el detective Lennie Briscoe (el personaje con el que moriría en 2005), ya había interpretado a Frank Lehrman, un abogado que apareció por primera vez en la segunda temporada.

Rose McIver, la zombi de las mil caras

La carrera de Rose McIver la ha llevado a interpretar tanto a la Power Ranger amarilla, como a Campanilla en «Erase una vez» o la inocente Vivian Scully de «Masters of Sex», pero ningún papel ha sido tan variado como el que realiza en «iZombie».

Aunque en este caso no tenemos diferentes papeles para una misma actriz, las características del personaje de Liv Moore (una zombi de nueva generación) hace que McIver tenga que adaptarse a su personaje en cada capítulo ¿La razón? Pues que en la serie se dedica a comer cerebros y curiosamente, cada vez que hace eso acaba recibiendo las características de ‘su víctima’ y adoptando sus características.

Así pues, Liv ha pasado por fases en las que parecía una deportista de elite adicta al riesgo, una madre reciente, una psicóloga neurótica o un pintor mujeriego, dándole vueltas y vueltas a su personaje de forense.

¿Se os ocurren más casos así? No dudéis en compartidlos