El presidente de Telefónica José María Álvarez-Pallete, durante la presentación de Aura
El presidente de Telefónica José María Álvarez-Pallete, durante la presentación de Aura - EFE
MWC 2017

Aura: el asalto de Telefónica hacia el control de los datos

La plataforma de la firma española de telecomunicaciones avanza hacia una nueva relación con el consumidor de sus servicios con la llamada Cuarta Plataforma, pero para qué servirá y cuál es su intención

MADRID Actualizado: Guardar
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En los últimos años, las empresas de telecomunicaciones se han quejado, cuando tenían la oportunidad de hacerlo, que bajo la infraestructura que despliegan - el despliegue de conexiones y redes y su obvia inversión- se han «aprovechado» empresas más jóvenes, surgidas de la esfera de la tecnología e internet, han comenzado a hacer negocio sobre sus carreteras. Las llamadas OTT- Over The Top, en inglés- han sacado provecho de la expansión de internet en el planeta basando gran parte de su negocio en el tratamiento de los datos e información personal de sus usuarios.

Un reparto de la tarta que a las «telecos» no han convencido puesto que han visto reducir parte de su negocio. Telefónica, ahora, quiere hacer las paces con las empresa tecnológicas, generalmente afincadas en el corazón de la innovación, Silicon Valley, con la Cuarta Plataforma -las otras tres son redes, sistemas y servicios- llamada sencillamente Aura, un próximo servicio que llegará en algún momento de los próximos doce meses y que tiene la intención de acumular los datos de sus clientes para que éstos puedan gestionar su vida digital.

Un indudable «cerebro» de, por ahora, confusas intenciones.

Bien se sabe que los datos personales son, hoy en día, el oro más preciado, porque gracias a ellos se pueden poner en marcha innumerables servicios, tomar decisiones en tiempo real, aplicar técnicas de Big Data para, una vez vez procesados, ser más eficiente a nivel productivo. Multitud de oportunidades que las operadoras, que ya tienen a su alcance multitud de información acerca de sus clientes, no han sabido aprovechar. Con este revolucionario invento -o deberíamos decir, estrategia- Telefónica pretende recabar, reutilizar y explorar los datos de sus usuarios bajo una, a priori, buena intención: es decir, darle a sus clientes un paquete de información para controlar, básicamente, su vida digital.

La operadora prefiere defender que se trata de una plataforma para la «gestión» y no tanto para el «control», aunque al final viene siendo tres cuartos de lo mismo. Indudablemente este proyecto contempla, sin embargo, algo desconocido que implora un potencial conflicto. Para muchas personas el modelo de negocio y el tratamiento de la información que realizan Facebook o Google no es nada pernicioso. Son conscientes que, evidentemente, cedemos parte de nuestra privacidad, pero a la gran mayoría no nos importa.

Es más, a estas empresas, que ofrecen servicios útiles para muchas personas, se perciben modernas. «Cool», si te pones Pero, al contrario de lo que sucede con estas firmas, que una operadora se meta ahora en esta batalla, aunque sea desde su propia parcelita, puede despertar ciertos recelos. ¿Para qué, por qué y de qué manera quiere Telefónica mis datos? No es que lo quieran, es que simplemente ya los tienen. Únicamente, han decidido procesarlo y abrir una ventana para airearlos. La operadora española sabe tanto (o incluso más) de sus clientes que las empresas de internet. Desde dónde llaman, a quién llaman, cuánto se gastan en tarifas de datos, qué contenido consumen, durante cuánto tiempo o qué programación de Movistar Plus son sus favoritas.

Durante la presentación en el Mobile World Congress de Barcelona, Telefónica, Chema Alonso, Chief Data Officer de Telefónica, aseguró que todos esos datos «son» del propio usuario. «Puedes hacer con ellos lo que quieras y llevártelos contigo incluso si dejas la compañía. Pero resulta que Google o cualquier otro proveedor de servicios podría estar interesado en conocer esos datos. Nosotros lo que decimos es que es el propio usuario el que tiene que decidir qué datos, de los que tiene sobre ti Telefónica, quieres compartir con ellos. Y a cambio de qué», argumentó.

«La Cuarta Plataforma, para nosotros, es una manera de intentar devolver el control de los datos al cliente [...] Estamos intentando darles herramientas y educarles para que entiendan cuáles son los datos que generan por el uso de sus servicios en Telefónica»
Chema Alonso , CDO de Telefónica

«La Cuarta Plataforma, para nosotros, es una manera de intentar devolver el control de los datos al cliente», aseguraba en una conversación con ABC. «Una de las cosas que creemos es que las empresas tienen que tener valores y ética más allá del negocio, y en Telefónica decidimos aplicar valores a la compañía tiempo atrás y en el caso de los datos aplicamos valores que van hacia la transparencia, hacia los usuarios para dotarles de herramientas y control de privacidad en vez de hacer negocio con ella. Estamos intentando darles herramientas y educarles para que entiendan cuáles son los datos que generan por el uso de sus servicios en Telefónica», comentaba Alonso a este diario tiempo atrás.

Por ahora, se conocen algunas de sus intenciones. Pero, ¿y los usuarios? ¿Deben de temer por quién accede a sus datos? «Eso es un debate que nos estamos planteando; cuál es el control que tiene una persona de esos datos, y los límites que ponemos a esas grandes empresas que recolectan tanta información de los individuos. Al final, que una empresa conozca todos los datos de los ciudadanos de España y sus hábitos, y los tenga perfilados, por religión, geográfica, donde trabaja, número de hijos, por dónde se mueven… puede llegar a controlar un país, porque esa información da poder», insistía. Sin embargo, en una entrevista a Chema Alonso concedida en «El Confidencial» ha avanzado que Telefónica no está actualmente vendiendo datos de sus usuarios, ya que por ahora «no hay modelo de negocio, por eso no hablamos de ello». A su juicio, «antes no éramos enemigos de WhatsApp o Google, ni lo somos ahora. Como todas las compañías, a veces hay discrepancias, pero es lógico».

«Queda saber el grado de transparencia que Telefónica impondrá, y sobre todo, si de verdad sirve como semilla de un clúster para que el usuario no solo disponga de los datos sobre él en poder de Telefónica»
David Fernández , abogado

Para algunos expertos, sin embargo, Aura es un primer paso para la transparencia en datos para que el usuario final conozca lo que una empresa sabe de él. «Actualmente los usuarios no son conscientes de todo el rastro de conocimiento personal que va dejando en cada una de sus acciones dentro de las plataformas tecnológicas. Y tampoco es conocedor de cómo le puede afectar la utilización de esos datos para su día a día, cada vez con mayor trascendencia», señala a este diario David Fernández, abogado especialista en ética y filosofía de la robótica e Inteligencia Artificial.

En su opinión, es «un avance» en el manido consentimiento que el Registro General de Protección de Datos impone para obtener y utilizar los datos personales. «Ahora bien, queda saber el grado de transparencia que Telefónica impondrá, y sobre todo, si de verdad sirve como semilla de un clúster para que el usuario no solo disponga de los datos sobre él en poder de Telefónica, sino cualquier reguero que vaya dejando por la Red. Podría darnos pánico conocer todo lo que Facebook, Amazon o Google sabe sobre nosotros. ¿Estarán estas empresas en disposición de mostrarnos toda la información utilizada o utilizable, y con qué criterios y con qué código ético la utilizan? Serán preguntas cuyas respuestas solo serán obtenidas si hay una legislación efectiva que proteja al usuario del potente arma que constituye la obtención y utilización de datos de forma masiva», añade.

Primeros pasos para entrar en el mercado

Para otros expertos este es el inicio de una nueva relación comercial. «La sensación que me da es que se trata de una plataforma para legitimar el uso de sus usuarios, y que se está vendiendo como «benévola» para que mucha gente dé el visto bueno para este negocio», sostiene Sergio Carrasco, abogado especializado en derecho tecnológico en Fase Consulting.

«Que uno de los grandes responsables a la hora de tratar datos de millones de usuarios quiera ahora erigirse en protector de la privacidad y de los datos de los mismos debería llamar la atención»
Sergio Carrasco , abogado

«Creo que hay que diferenciar lo que se está vendiendo de cara a los usuarios, principios de transparencia y control de los datos personales, de la realidad. De unos primeros anuncios en los que parecía que se quería vender que los usuarios podrían controlar los datos que obtenían grandes empresas como Google o Facebook hemos pasado a un modelo en el cual Telefónica quiere contar con mayores posibilidades a la hora de comerciar datos con los usuarios que accedan a ello, posiblemente a través del ofrecimiento de recompensas».

Al final -reconoce- la realidad es que Telefónica cuenta con datos que son realmente muy atractivos para muchas empresas y todo esto se acabará instrumentando a través de acuerdos económicos con los prestadores que quieran acceder a los mismos. «Los datos son un nuevo valor, y Telefónica quiere entrar más fuerte en este mercado. Que uno de los grandes responsables a la hora de tratar datos de millones de usuarios quiera ahora erigirse en protector de la privacidad y de los datos de los mismos debería llamar la atención», sugiere.

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