La mitad de los jóvenes españoles creen que su situación mejorará en un año

La mitad de los jóvenes creen que su situación mejorará en un año, aunque siete de cada diez admiten que es «muy o bastante probable» de que tendrán que trabajar de lo que sea. Es más el 68% cree que sus condiciones laborales seguirán igual o empeorarán en el futuro y que tendrán peores oportunidades de trabajo que sus padres (46,6%).

Estas son algunas de la conclusiones del primer Barómetro 2017 del ProyectoScopio presentado este jueves por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la FAD y cuyo principal objetivo es conocer la visión actual de los jóvenes sobre sus valores e intereses y su situación personal y laboral.

Sobre sus condiciones de futuro, el 61% cree que tendrá que seguir dependiendo económicamente de su familia, aunque tres de cada diez baraja como posibilidad la idea de irse a trabajar al extranjero. De hecho el 22% ha cambiado su residencia habitual por motivos laborales, aunque la mayoría de los traslados han sido dentro de la misma comunidad autónoma (10,6%). Solo el 4% de los jóvenes optó por salir al extranjero y en su gran mayoría el país de destino elegido fue el Reino Unido (38%) seguido de Irlanda (12%).

En esta línea, existe un acuerdo muy alto (59%) con las ideas de que las condiciones laborales son mucho mejores fuera de España y que es más fácil encontrar un trabajo relacionado con la formación adquirida (49,5%).

«El realismo con que los jóvenes afrontan la situación actual es muy valorable. Demuestra que tienen criterio, decisión y empuje. Manejan bien la realidad y son conscientes de que no les van a dar nada hecho», destacó el director general de la FAD, Ignacio Calderón, durante la presentación de los resultado de esta encuesta on line realizada a 1.247 jóvenes de entre 15 y 29 años el pasado mes de abril.

La situación laboral es la principal preocupación de los jóvenes españoles. El paro (42,7%), los bajos salarios (40,2%) y la inseguridad y la precariedad de los empleos (37,9) ocupan el podio de los problemas que más les afectan. Y no es para menos, teniendo en cuenta la última Encuesta de Población Activa (EPA) que elevaba hasta el 41,6% el paro entre los jóvenes hasta los 25 años.

«Este informe demuestra que la crisis ha afectado sobre todo a la población juvenil y hay una ruptura del ideal de que van a vivir mejor que sus progenitores. La situación en el mercado laboral es perversa porque la competencia es brutal debido a la escasez de trabajo. Cuanto más formación tiene el joven más posibilidades tiene de conseguir un empleo, pero los más formados expulsan a los menos formados en puestos para los que están sobrecalificados», advirtió, por su parte, la directora del Centro Reina Sofía, Anna Sanmartín.

Al igual en estudios anteriores, los jóvenes españoles siguen muy satisfechos con su familia (81%) cuyo apoyo consideran esencial (52%). Las instituciones, sin embargo, inspiran menos confianza a las nuevas generaciones. Los partidos políticos (63,9%), la instituciones religiosas (32,8%) y el sistema financiero y bancario (28,9%) son las que más desafección causan.

Los jóvenes son además cada vez más tolerantes con aspectos relacionados con la moral privada. Casi ocho de cada diez considera «totalmente admisible» la adopción de hijos por parte de personas homosexuales; el 69,5% aprueba la eutanasia, mientras que el 68,5% está a favor del aborto libre.