La serpiente y el arco iris

Un científico es contratado por una empresa farmacéutica de Boston para que acuda a Haití en busca de una droga que paraliza completamente a las personas y las hace parecer muertas. Los efectos de esta droga son supuestamente el origen de la leyenda de los zombis.

Después de los éxitos de "La última casa a la izquierda" y sobre todo de "Pesadilla en Elm Street", Wes Craven se convirtió en uno de los referentes del cine de terror de los 80, pese a contar con más apoyo por parte del público que por parte de la crítica. "La serpiente y el arco iris" forma parte de un grupo de filmes que Craven estrenó sin conseguir el resultado esperado. Rodada más bien con poco presupuesto y con una estética televisiva, la cinta se presenta como una mezcla entre el cine de terror surrealista, la denuncia política, el documental antropológico y una historia de amor. El resultado de esta mezcla genérica provocó un fracaso comercial, y eso que la película tiene un interesante punto de partida con la novela homónima de Wade Davis.