Seat deposita sus esperanzas de futuro en Cupra
La marca deportiva, que en 2023 superará en facturación a su matriz, confía en vender 500.000 coches a partir de 2026 y anuncia el lanzamiento de tres modelos: Terramar, Tavascan y UrbanRebel
Seat vuelve a dar beneficios tras recortar costes y gracias a los resultados de Cupra
Mayor crecimiento, mayores márgenes, futuro eléctrico. Definitivamente, Cupra es la marca en la que Seat deposita sus esperanzas de futuro , tanto de crecimiento como de rentabilidad. Cuando en 2018 se lanzó Cupra como la marca deportiva de Seat pocos podían imaginar que en menos de un lustro la apuesta pasaría de ser una oferta complementaria a definir el eje de crecimiento de la automovilística con sede en Martorell (Barcelona), una progresión que desde la dirección de la compañía se asegura que en ningún caso amenaza al futuro de Seat, sino todo lo contrario, lo que hace precisamente es asegurarlo.
Así lo ha confirmado esta tarde la compañía en el antiguo circuito de Terramar (Sitges), el escenario donde en 2018 nacía Cupra y en el que hoy se han mostrado las cartas reservadas para la firma hasta 2025 y en adelante: tres nuevos modelos y un crecimiento sostenido de ventas para llegar a los 500.000 'cupras' entregados anualmente a medio plazo, una cifra que se acercaría por si sola al récord histórico de 540.000 coches vendidos por Seat en el 2019 prepandémico.
Las cifras hablan por sí solas. Si hasta la fecha, Cupra ha entregado cerca de 200.000 unidades y su facturación ha pasado de 430 millones de euros en 2018 a casi 2.200 millones de euros en 2021 -«cifras que se sitúan muy por encima de todas las expectativas», insisten desde la dirección-, la progresión para los próximos años se acelera, con la previsión de doblar facturación y ventas ya en este ejercicio. «Nuestro objetivo a medio plazo es entregar 500.000 coches al año e impulsar nuestra expansión internacional hacia nuevos mercados, así como entrar en nuevos segmentos», ha confirmado esta tarde Wayne Griffiths, CEO de Seat y Cupra. Por ahora, se insiste desde la firma, la clave es que hay un proyecto de futuro y las bases de la recuperación están asentadas: en este primer trimestre de 2022, en parte gracias a los mayores márgenes de Cupra -marca de la que se entrega un coche por cada tres de Seat- ha vuelto a los beneficios tras los dos últimos ejercicios en rojo.
En un encuentro con la prensa posterior, Griffiths confirmó que prevén que ya en 2023 Cupra superará en facturación a Seat . En 2022 casi se llegará al equilibrio en cuanto a margen operativo mientras que en ventas Cupra alcanzará sobre el 40% del total de vehículos entregados.
El acelerón de Cupra en los últimos años se explica por la excelente acogida en mercados internacionales -Alemania, por ejemplo-, y particularmente con modelos como el Formentor, el exitoso SUV 'crossover' que con 100.000 coches entregados es el más vendido de la firma. También se entiende por la clara apuesta del grupo, que en momentos de dificultades -crisis Covid, falta de suministro de semiconductores…- ha decidido priorizar Cupra frente a Seat por sus mayor rentabilidad.
El camino ya quedó trazado cuando en su momento, en una decisión clave, la dirección decidió que el primer modelo 100% eléctrico de la automovilística española, el Born, se vendiese bajo el emblema de Cupra y no de Seat, disparando la inquietud en parte de la plantilla sobre el futuro que espera a la histórica firma. Lo que está por venir en los próximos años, queda claro, va en la misma dirección, tal y como ha confirmado la firma hoy en un evento con más de 600 invitados. El futuro de Seat lo escribe Cupra.
La ofensiva de nuevos modelos es importante. La mayor novedad avanzada este martes -en un acto con más de 600 invitados, entre estos el presidente de la Generalitat, Pere Aragonés, la de Navarra, María Chivite, y la ministra Raquel Sánchez- es el lanzamiento en 2024 del bautizado como Cupra Terramar, un SUV deportivo híbrido enchufable que implicará el debut de Cupra en el segmento que más crece en Europa. Se fabricará en Hungría, en la planta de Györ de Audi. El Terramar estará disponible con motores de combustión, así como con una nueva generación de sistemas de propulsión híbridos enchufables que ofrecen alrededor de 100 kilómetros de autonomía en modo puramente eléctrico, ha informado la compañía. También en 2024 se lanzará el Tavascan , un SUV 'coupè' que se convertirá en el segundo modelo 100% eléctrico de la compañía. Fuentes del sector aseguran que podría fabricarse en China.
2025, salto de escala
Tanto el Terramar como el Tavascan serán el prólogo de 2025 , cuando se confía en que Cupra dé su definitivo salto de escala con el eléctrico urbano que lidera Seat tanto para Cupra como para el resto de marcas del grupo Volkswagen. «El Cupra UrbanRebel -nombre provisional- será el mayor proyecto de nuestra compañía en los próximos años, ya que es clave para nuestra transformación en una marca totalmente eléctrica», ha confirmado Griffiths de un vehículo llamado a garantizar la continuidad industrial y la electrificación de la planta de Martorell y cuyo desarrollo va de la mano del Perte del Vehículo Eléctrico y Conectado, que a su vez incluye la nueva fábrica de baterías de Sagunto (Valencia).
«El UrbanRebel es más que un coche para Cupra. Es el modelo que democratizará la movilidad eléctrica urbana. Emocional, sexy, divertido de conducir y, al mismo tiempo, accesible, con él demostraremos que los coches eléctricos no tienen por qué ser aburridos. Así será el vehículo de entrada a nuestra futura gama», ha señalado Griffiths durante el evento.
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