Grazalema recibe una nevada copiosa dos años después de la última

Pasaban las once y media de la mañana, llovía en Grazalema y a pesar de que hacía frío se produjo una bajada importante de las temperaturas en pocos minutos. Ya estaban los ingredientes y los vecinos de la localidad que da nombre al Parque Natural, y también los de Villaluenga del Rosario, se disponían a recibir a los primeros copos del invierno. Y no tardaron en llegar.

En pocos minutos los picos de las montañas, zonas como las Palomas, el Torreón, el Boyar, etc., se vistieron de blanco e incluso la nevada bajó hasta el pueblo, aunque aquí no cuajaron los copos porque se encontraban por encima de los cero grados. Pronto se veía que ésta era una nevada importante, algo que no se producía desde hace dos años, ya que en el invierno anterior solo se registraron pequeñas nevadas que apenas cuajaron.

La llegada de la nieve provocaba el primer efecto llamada de cada año, y más si se produce de día como en esta ocasión. Decenas de vecinos de Grazalema tomaron bufandas y abrigos y no tardaron en subir al Puerto de las Palomas para volver a disfrutar del espectáculo. Esta marcha se producía, sobre todo, antes del cierre de la carretera del Puerto de las Palomas, la CA-9104 que va de Grazalema a Zahara, se cerrara al tráfico, algo que no tardó mucho en llegar y se produjo a las 12.45 horas. Unos minutos antes ya se recomendaba circular con precaución por la A-372, la El Bosque-Grazalema, ya que a la altura del Puerto del Boyar se comenzaban a producir placas de hielo en la calzada y algunos conductores tuvieron problemas para circular.

Además de la nieve, desde primera hora del día la lluvia, la niebla y el frío fueron los protagonistas. Asimismo, los ayuntamientos de la zona habían dispuesto sal para, por si fuera necesario, extenderla por las calles de Grazalema y Villaluenga y evitar que se produjeran placas de hielo que dificultaran el paso de los peatones. Pero ayer no fue necesario utilizar esta medida de prevención.